El Hospital del Vall d'Hebron inaugura el bloque quirúrgico robotizado más moderno de España

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dcaminal35646377 barcelona 23 09 2016 barcelona quir fano del nue160923125613 / JORDI COTRINA

ÀNGELS GALLARDO / BARCELONA

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Dejar de operar en un quirófano estructurado hace 55 años, cuando el instrumental se custodiaba y esterilizaba cada noche en unos almacenes distantes de la sala de operaciones y era transportado todas las mañanas por el personal de enfermería, para hacerlo en unos espacios quirúrgicos robotizados donde todo es compacto e invisible pero está presente, implica un cambio radical en los rituales y métodos de acción de cirujanos, enfermería, anestesiólogos e incluso personal de limpieza. Así se ha hecho el Hospital General del Vall d’Hebron, de Barcelona, donde hasta hace un mes se operaba en los quirófanos que se instalaron, dispersos, en cada planta de hospitalización en los años 60 del siglo pasado.

El boque quirúrgico, dotado de 19 quirófanos de alta tecnología -estrenan el 80% de su dotación técnica e informática- que este viernes ha inaugurado el 'president' Carles Puigdemont en el Vall d’Hebron, acaba con ese trasiego y con una infinidad de procedimientos intraquirúrgicos que ahora quedan absorbidos por un sofisticadísimo entramado informático que prácticamente lo robotiza todo menos las manos y ojos del cirujano, y el cerebro de la enfermería, que sigue siendo responsable de que todo lo que ocurre alrededor de la mesa de operaciones mantenga la secuencia imprescindible, por el bien del paciente.

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El Vall d’Hebron se convierte así en el hospital dotado del bloque quirúrgico más moderno de España, asegura su responsable, el cirujano Juan Antonio Hueto. Se ha instalado en un edificio anexo al área de urgencias del Vall d’Hebron, en tres plantas de nueva construcción que suman 9.000 metros cuadrados, una obra que se inició e el 2005 y se paralizó tras los primeros recortes económicos producto de la crisis, cuando el Govern de Artur Mas decidió detener cualquier inversión en infraestructura sanitaria. El coste final de la instalación ha sido de 37 millones de euros, 21 en construcción y 16 en equipamiento. Esta instalación quirúrgica se suma a la ya existente en los hospitales de Traumatología y Maternoinfantil del Vall d’Hebron, que en conjunto suman 50 quirófanos.

NAVEGADOR PARA EL CEREBRO

Once de las nuevas salas de operaciones, que ya están en funcionamiento, dado que el Vall d’Hebron no ha dejado de operar en ningún momento, son intercambiables y permitirán realizar en ellas cualquier tipo de intervención quirúrgica. Las ocho restantes son específicas: seis se destinan a cirugía cardiaca, que precisa disponer de bomba de circulación extracorpórea y tecnología de uso cardiaco o coronario exclusivo, y los dos restantes son los denominados quirófanos híbridos -“incomparables en toda España”, advierte Hueto-, los más sofisticados y avanzados, que se destinan a neurocirugía cerebral con navegador de imagen y un arco radiológico en tres dimensiones situado dentro del mismo quirófano, y un robot Da Vinci de última generación con el que se realizará la cirugía prostática, bariátrica [reducción de estómago], colorectal y de otorrino, entre otras. “Los beneficios para algunos pacientes serán evidentes -afirma Hueto-. La recuperación posoperatoria y los efectos secundarios de la cirugía serán mucho menores”.

NO HABRÁ MAYOR ACTIVIDAD

El Vall d’Hebron, dotado de 1.150 camas de hospitalización, asume anualmente una media de 36.000 intervenciones quirúrgicas, de las que unas 9.000 se realizan en el hospital general que ahora estrena bloque quirúrgico. Este equipamiento permitiría incrementar en un 20% la cifra de intervenciones, pero esto no será posible a corto plazo ya que la unidad de camas de cuidados intensivos, área implícita para acoger a los intervenidos, que se ubicará sobre el nuevo bloque quirúrgico, no dispondrá de presupuesto hasta como mínimo el 2017. “Sin más camas para enfermos críticos recién operados no es posible aumentar la actividad quirúrgica -indica Hueto-. Tu puedes operar mucho, pero has de tener libres esas camas, que han de ir unidas a los quirófanos”.

La reducción de las listas de espera quirúrgica que podría propiciar esta nueva instalación no será tal, al menos de momento y con los actuales presupuestos en la Conselleria de Salut, ha destacado personal quirúrgico del Vall d'Hebron. "No operan los quirófanos, sino los cirujanos, y estos siempre han estado disponibles en los horarios de tarde, pero eso cuesta dinero y la mayoría de salas de operaciones del Vall d'Hebron siguen cerradas por las tardes", advierte una cirujana.