Esteve se ve forzado a destituir a su mano derecha en la diputación

Crónica de una destitución anunciada. Apenas 10 días después de rechazar la dimisión de su número dos en la Diputación de Barcelona, el presidente de la institución, el convergente Salvador Esteve, anunció ayer, mediante un brevísimo comunicado público, que aceptaba la renuncia de Josep Maria Matas. Una decisión tomada justo después de que trascendiera que la fiscalía de Catalunya ha abierto diligencias sobre los negocios de una empresa de Matas con la Associació de Municipis de Catalunya (ACM), entidad que agrupa a los ayuntamientos de CiU y de la que fue secretario general. En esa etapa también tuvo como superior directo a Salvador Esteve, entonces presidente de la ACM.

Una vez que se supo que la fiscalía abría una investigación para aclrara cómo y por qué Matas facturó 900.000 euros a la ACM a través de la firma Parés i Solé SL, Esteve tuvo claro que no podía mantener más en el cargo a su número dos, sobre cuya actuación llevaba días acumulando información. Fuentes cercanas a Esteve sostienen que antes de que este ocupara la presidencia de la ACM Matas ya había accedido a la cúpula de la entidad y que fue CiU la que le aupó al cargo de coordinador general de la diputación.

SILENCIO Y DESMARQUE / Matas y Esteve se negaron ayer a dar más explicaciones. El ya exsecretario general de la diputación asegura que colaborará con la justicia y dice sentirse víctima de una persecución. Esteve se limitó a emitir el comunicado en el que argumenta que la destitución persigue «dejar a la institución al margen de una polémica que en ningún caso ha de dificultar la gestión de la corporación».

Esteve y buena parte de los partidos integrantes de la diputación optan por dar perfil bajo a esta crisis, argumentando que es la ACM la que debe dar explicaciones de las actividades empresariales que llevó a cabo Esteve, especialmente en dos etapas. Entre el 2005 y el 2006, facturó más de 600.000 euros; dos años antes, emitió facturas por valor de unos 300.000 euros más. El objetivo social de la empresa es la prestación de servicios de publicidad, campañas de difusión publicitaria y estudios de mercado. La asociación municipalista se ha limitado a reconocer que Matas fue una de las empresas proveedoras de la entidad y a afirmar que «las relaciones que ha tenido la ACM con esta sociedad mercantil se adecuan a la legalidad».

En el capítulo de las valoraciones políticas, elpresident de la Generalitat, Artur Mas, evitó evaluar la destitución de Matas, quien ocupa la persidencia de CDC en la comarca de Osona. Mas calificó lo sucedido como «una renuncia finalmente aceptada» y se desmarcó de la decisión apelando a la «autonomía total» de la diputación.

LEGALIDAD Y ÉTICA / Paralelamente, la ACM sigue llevando a cabo una investigación interna sobre los negocios de la empresa de Matas, Parés i Solé SL con la entidad municipalista. Fuentes de la asociación apuntan que las primeras conclusiones a las que está llegando este repaso de documentación hacen difícil llegar a la evidencia de que se han cometido ilegalidades. Otra cosa es que, como han reconocido fuentes cercanas a Salvador Esteve, sea insostenible ética y políticamente que Matas aprovechase su alto cargo en la ACM para convertirse en uno de sus principales proveedores.

Matas ha mantenido silencio sobre esta investigación. Al conocerse la investigación que abrirá la fiscalía, se limitó a afirmar que esta decisión obedece a una persecución mediática y se mostró dispuesto a colaborar con la justicia aportando toda la documentación necesaria.