Falta de respeto parlamentaria

Tan importante es saber ganar como perder. Pero por desgracia para nuestros políticos lo de perder no lo llevan nada bien. Puesto que cuando no salen los planes como ellos quieren, la falta de respeto, la irracionalidad y la insensatez fluyen en sus actos y palabras como respuesta al poco talante democrático que se espera de un político democrático y valedor de lo que son: representantes del pueblo.

Todo esto lo digo por lo ocurrido en la toma de posesión del nuevo presidente del Parlament, puesto que al final de su discurso -en el que abogaba por el diálogo, la concordia y el nuevo hacer-, la llamada bancada del "constitucionalismo" no ha aplaudido, salvo contadas excepciones. Y menos mal que el PSC en sus discursos posteriores ha hablado bien del discurso, porque los diputados del PP y los ganadores de Ciutadans han incidido en sus discursos en la búsqueda de la continuidad del enfrentamiento, pues eso creen que les favorece.  Pero por desgracia demuestra su falta de democracia. Como lo han demostrado cuando después del himno catalán, se ha gritado: "Libertad". Ellos, los que  hablan de respeto, han abandonado el hemiciclo con expresiones irónicas y gestos de ninguneo a aquellos que están condenados o exiliados por defender lo que el pueblo voto. Pero lo peor es que este hecho ha demostrado, desde mi punto de vista, un talante antidemocrático y un no saber perder.

Mal vamos si eso es lo que los llamados constitucionlistas entienden por democracia.