El Gobierno entregará en abril tarjetas monedero a 70.000 familias vulnerables

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un real decreto que concede a Cruz Roja la puesta en marcha, a partir de abril, de las tarjetas monedero destinadas a familias con niños a cargo que cobran un 40% menos que la renta media. La iniciativa tiene como objetivo que estas familias en situación de vulnerabilidad puedan acudir a los supermercados o tiendas, en lugar de a los bancos de alimentos, a comprar comida o productos de higiene.

Las ayudas para comprar productos de alimentación e higiene en los supermercados oscilarán entre los 130 y los 220 euros

El fin es acabar con el estigma que implica acudir a los bancos de alimentos, reducir las llamadas 'colas del hambre' y que los beneficiarios puedan elegir los alimentos que quieren consumir. Para ello, se llegará a un acuerdo con los supermercados colaboradores que permitirá también que estos puedan vetar en las cajas aquellos productos que no entran dentro del programa, según explican fuentes del Ministerio de Derechos Sociales. Por ejemplo, se podrá comprar carne pero no cervezas. Se podrán comprar compresas pero no maquillaje.

El modelo permitirá acabar con el estigma de acudir a los bancos de alimentos y los beneficiarios podrán elegir los productos a consumir

El ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, ha asegurado que el "cambio de modelo supone un paso decisivo para dignificar la protección social y que las familias con hijos no tengan que ir a las 'colas del hambre'". Asimismo, permitirá "acceder directamente a productos frescos que, por su naturaleza, no era posible incluir en el reparto en bolsas". El ministro ha destacado también que se aumentarán "las cuantías" que reciben las familias vulnerables.

Margen a las autonomías

La puesta en marcha de las tarjetas monedero se acordó en 2021 por unanimidad en un Consejo Interterritorial, pero no todas las autonomías han hecho los trámites necesarios para su puesta en marcha en mayo, tal como manda el Fondo Social Europeo Plus del que se nutren las ayudas. Por ello, el Gobierno central concede a Cruz Roja una subvención para que gestione, de forma "transitoria y excepcional", hasta diciembre, la entrada en vigor y el funcionamiento de las tarjetas monedero. "Hoy les damos a las comunidades tiempo y recursos para que se organicen de forma que puedan asumir su gestión completa a partir del año que viene", ha indicado el ministro.

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El importe de la subvención es de 100 millones de euros (95,5 millones para la compra de alimentos y productos básicos y 4,7 millones para los gastos técnicos). Y el importe máximo a repartir por cada familia será determinado por los servicios sociales autonómicos en función de la siguiente escala: dos miembros de la unidad familiar (una persona adulta y una persona menor), 130 euros al mes; tres miembros, 160 euros al mes; cuatro miembros, 190 euros al mes y cinco o más miembros de la unidad familiar, 220 euros al mes.

Se calcula que se verán beneficiadas unas 70.000 familias en situación de "privación material severa" y la concesión de la gestión a la Cruz Roja responde a la intención, según fuentes ministeriales, de que las familias beneficiadas no dejen de recibir ayudas, dado que en abril de 2024 finaliza el reparto de alimentos del anterior Programa del Fondo de Ayuda Europeo para los Más Necesitados, dentro del marco financiero del Fondo Social Europeo anterior.

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El plan será financiado por el tramo estatal del fondo, lo que "liberará recursos autonómicos para que las comunidades puedan atender otras necesidades y colectivos", ha añadido Bustinduy. La precisión viene motivada porque los bancos de alimentos y entidades del tercer sector han dado la voz de alarma ante la posibilidad de que el nuevo modelo suponga el fin de muchas entidades dedicadas al reparto de alimentos y deje fuera a muchas personas vulnerables.

Fuentes de Derechos Sociales niegan la mayor. Reconocen que, al igual que el modelo anterior, "no cubre todas las necesidades", pero sostienen que como el nuevo programa no tendrá coste para las comunidades, estas administraciones y los ayuntamientos podrán seguir financiando los bancos de alimentos y adoptar políticas destinadas a las personas en situación de pobreza que no recibirán las tarjetas monedero.