Badalona supera de largo los nuevos límites europeos de contaminación

Casi 10 kilómetros separan la principal estación de control de la calidad del aire del Eixample, el distrito más contaminado de Barcelona, del principal punto de medición existente en Badalona. Sin embargo, y pese a esta distancia, los datos registrados en la cuarta ciudad de Catalunya se asemejan peligrosamente a los del barrio planificado por Cerdà.

En los recuentos anuales de Badalona, según los datos recogidos por el Departament d'Acció Climàtica a los que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, no se superan los límites marcados por la Unión Europea en cuanto a óxido de nitrógeno (NO₂) ni partículas en suspensión (PM10). Sin embargo, sí están muy por encima de los nuevos límites de contaminación aprobados por el Parlamento Europeo cara a 2025.

En concreto, el año pasado, la media anual de este óxido fue de 31 microgramos por metro cúbico, cuando en el Eixample roza los 36. Es cierto que en los últimos años su presencia ha ido descendiendo, pero también es verdad que, en 2022, la cantidad de NO₂ aumentó. El límite europeo es de 40, pero pronto será de 20. Por lo tanto, los nuevos márgenes obligarán al ayuntamiento a tomar medidas en la gestión del tráfico con el objetivo de cumplirlos.

Los actuales límites europeos no se superan pero la concentración de contaminantes está por encima de la futura norma

Este escenario, tras el anuncio de Albiol de aplazar la puesta en marcha de la zona de bajas emisiones, arroja una pregunta evidente. ¿Es viable mejorar la calidad del aire sin una regulación de los vehículos más contaminantes? En Acció Climàtica afirman que no. Consideran que la Comisión Europea no entraría a valorar un plan de calidad del aire que no contemple zonas de bajas emisiones.

Deberes pendientes

Al NO₂ hay que sumar las PM10. En este caso, la concentración media del último año es de 23, por debajo del umbral establecido por Europa (40), pero superior al límite de 20 que entrará en vigor en breve. Respecto a las partículas, también se observa un incremento respecto a 2021. Y el contexto más preocupante que envuelve a esta retahíla de datos: la concentración de los principales contaminantes (NO2 y PM10) está lejísimos de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es decir: la polución sigue siendo un problema en Badalona, ha aumentado en 2022 y se deben buscar soluciones ya que permitan situar a la ciudad dentro de los nuevos límites fijados por la UE

La contaminación en Badalona aumentó en 2022 respecto al año anterior

Los indicadores demuestran que en la ciudad hay una gran densidad de población expuesta a niveles altos de polución, lo que es un riesgo para la salud. Las emisiones del tráfico son las principales responsables de esta situación, aunque cabe recordar, apuntan fuentes de la 'conselleria', que Badalona está muy influenciada por la zona industrial del Besòs, en los barrios colindantes con Sant Adrià.

También se han dado casos de industrias situadas dentro del núcleo urbano que han generado problemas de malos olores o molestias por partículas. En 2022, obviando la media anual, se superaron los umbrales de ozono o NO₂ cinco veces en total, en episodios puntuales de corta durada.

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