Lluvias insuficientes

Las lluvias no le hacen ni cosquillas a la sequía pero alivian los caudales del Ter y el Llobregat

¿Cuánto tiene que llover en mayo para suavizar la sequía?

¿Por qué es tan grave esta sequía? Claves de una crisis que llegó para quedarse

Las precipitaciones rompen una "racha seca" pero abril se cerrará con menos lluvia de lo habitual

Una imagen del  pantano de Sau, en Vilanova de Sau (Barcelona) .

Una imagen del pantano de Sau, en Vilanova de Sau (Barcelona) . / Ferran Nadeu

Guillem Costa

Guillem Costa

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El remate final del episodio de calor extremo se ha manifestado en forma de lluvias. Unas precipitaciones, las de este fin de semana, que rompen una "racha seca" que en algunos lugares llegaba a los 60 días. El agua ha caído en muchos puntos de Catalunya, pero no en algunas de las comarcas de Lleida, una zona en la que la falta de agua está afectando gravemente la agricultura.

Una de las prioridades era que lloviese en las cabeceras de los ríos principales de las cuencas internas catalanas, el Ter y el Llobregat. Y así ha sido. ¿Pero ha llovido lo suficiente como para recuperar mínimamente los embalses? "No. En los pantanos no hay ningún cambio sustancial", aclara Aleix Serra, técnico del Servei Català de Meteorologia en declaraciones a EL PERIÓDICO.

Pantano de Sau desde el Mirador de Vilanova de Sau

Vista aérea del pantano de Sau. / ZOWY VOETEN

En las cabeceras de estos dos ríos, de hecho, es donde más ha llovido. En algunas zonas han caído 20 litros por m2 y en puntos concretos se ha llegado a máximos de 50 l/m2 (destacan los 62 l/m2 en Ulldeter o los 49 l/mNúria). Estos datos, que por la época en la que estamos tendrían que ser habituales, no se registraban desde hace dos años.

¿Y qué han provocado estos chaparrones? Pues básicamente la crecida de los ríos, que llevaban semanas con unos caudales agónicos. El estado del Ter y el Llobregat era crítico. En los cauces circulaba poca cantidad de agua: "Durante al menos unas horas, esto ha cambiado gracias a las lluvias de estos dos días".

"De todas formas, después de la escasez acumulada, el agua nunca viene mal. Al contrario, suaviza la situación", considera Serra. Con las últimas lluvias, algunos lugares de los Pirineos se acercan a lo que sería la media habitual del mes de abril.

Aun así, si nos fijamos en el panorama general de toda Catalunya, lo que haya llovido a lo largo de las de este fin de semana, no dará la vuelta a un mes primaveral que ha sido más seco de lo normal: "Esto ya no lo cambiaremos. Habremos tenido un abril con menos lluvias de lo que indica el promedio. Y esto agrava la situación".

Aguaceros litorales

En el conjunto del litoral y el prelitoral la media ha sido de entre 1 y 5 litros por m2. "Esto tiene importancia porque todo se humedece mínimamente, pero la sequía persiste, por si alguien lo duda", advierte el especialista.

Lo que ha pasado en Barcelona, las comarcas del Ebro, o a lo largo de toda la costa, aunque se celebre porque "veníamos de una racha seca de 60 días en ciertos observatorios", es lo que corresponde en primavera. Hay que tener presente que en estos momentos, nos encontramos en la gran "ventana de oportunidad" para poner freno (o intentarlo) a esta sequía extrema. El director de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) lleva semanas repitiéndolo: "Abril y mayo son las dos grandes ocasiones para recibir gran cantidad de agua".

Mapa de lluvia acumulada el fin de semana.

Mapa de lluvia acumulada el fin de semana. / Meteocat

¿Qué nos espera?

Abril ha sido un mes cálido, "no de récord", porque en 2011 se habían registrado temperaturas más elevadas, pero sí con más calor de lo que es normal. ¿Qué se necesitaría para poner punto y final a la sequía? "Una cantidad de lluvia ingente, hay demasiado déficit de precipitaciones acumulada", señala Serra.

Solo para mejorar un poco la situación, tendrían que llover 200 mm a lo largo del mes de mayo (esto superaría la media habitual). Según las previsiones del SCM, el mes que justo empieza será un poco más caluroso de lo que estamos acostumbrados a vivir, pero sin llegar a máximas excepcionales.

Entre hoy y mañana se repetirán las precipitaciones en los mismos puntos donde ha llovido. Después, en principio, volverá el tiempo estable y el calor no hará estragos. "Esperamos un mes de mayo habitual", zanja Serra.

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