colectivos vulnerables

La pobreza energética se duplica en dos años en Catalunya

Uno de cada cuatro catalanes es pobre, según los datos publicados por el Institut d'Estadística de Catalunya

¿Quién es vulnerable y quién no?: estos son los criterios que importan con la pobreza

pobreza energetica

pobreza energetica / CARLOS MONTAÑÉS

Elisenda Colell

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Las familias que sufren pobreza energética en Catalunya se han duplicado en los últimos dos años, según indica la Encuesta de Condiciones de Vida que ha publicado este lunes l'Institut d'Estadística de Catalunya (IDESCAT). Si en 2020 un 9,4% de los hogares catalanes no podían permitirse encender la calefacción o el ventilador, en 2022 este porcentaje ya sube al 19%, un récord histórico desde que hay registros. Es precisamente el mismo periodo en que los precios de la energía se han disparado. El informe también revela que las personas que viven bajo el umbral de la pobreza se mantienen estables respecto al año pasado: el 24,7% de los catalanes es pobre, y el porcentaje sube hasta el 30% en el caso de los menores de edad.

Cerca de un millón y medio de catalanes sufrían pobreza energética en 2022. Un dato de récord, nunca visto desde 2003, cuando se empezó a preguntar sobre esta temática en la encuesta de condiciones de vida del IDESCAT. La situación ha ido al alza en los últimos dos años. Antes de la pandemia, la cifra se mantenía estable en el 10%. Pero en 2021 ya subió hasta el 15,9%, y este 2022 ya afecta prácticamente a uno de cada cinco hogares en Catalunya. Precisamente en verano de 2021 los precios de la electricidad empezaron a subir, y tras la invasión de Ucrania los aumentos se han disparado. En Catalunya, los cortes de luz a las familias vulnerables están prohibidos, pero solo una empresa, Endesa, ha condonado la deuda acumulada a las familias afectadas y la Generalitat ayuda con el pago de facturas. Con el resto de empresas, los afectados siguen endeudados y recibiendo llamadas acosadoras para que paguen los recibos vencidos.

"Las medidas impulsadas por los poderes públicos hasta ahora han ayudado a parar el golpe, como la moratoria de los cortes de suministro, pero son insuficientes para garantizar el bienestar de una parte cada vez mayor de la ciudadanía", se queja la Alianza contra la Pobreza Energética (APE). Piden que el Gobierno Central cree una tarifa social eléctrica asumible para todos los hogares y que apliquen permanentemente la prohibición de cortes en toda España. A la Generalitat, reclaman que implemente el convenio con Endesa y lo replique con el resto de compañías. Recuerdan que el año pasado Naturgy, Endesa e Iberdrola obtubieron más de 8.000 millones de euros de beneficios, un aumento entre el 11% y el 36% respecto al año anterior.

Comer carne o pagar imprevistos

La grave situación de la pobreza energética es uno de los datos que muestra la encuesta de condiciones de vida en Catalunya. El 35% de los catalanes no puede afrontar gastos imprevistos de 800 euros, el 30,9% no puede permitirse ir una semana de vacaciones al año y el 5% no se puede comer carne, pollo o pescado cada dos días. Tres indicadores de 2022 que han subido entre uno y tres puntos respecto a 2021. "Esta situación es insoportable", se quejan desde la Taula d'Entitats del Tercer Sector, que piden plantear nuevas políticas contra la pobreza y la exclusión. "Si no lo hacemos, seguiremos arrastrando esta situación durante décadas", advierten en un comunicado.

En términos generales, el 24,7% de catalanes son pobres según la taxa Arope, que no solo mide los ingresos del hogar, sino las carencias materiales y la intensidad del trabajo. El dato ha bajado 1,2 puntos respecto al año anterior. La cifra de ingresos usa la renta de 2021, es por ello que esta reducción no es significativa, ya que los porcentajes que parten de las encuestas hechas en 2022 están empeorando. Si nos centramos tan solo en los ingresos, la cifra de personas que viven bajo el umbral de la pobreza es del 19,9%, el mismo que el año pasado. Y las personas que viven en la pobreza extrema son el 8% de catalanes, un punto menos que el año pasado. Según las entidades sociales, esto demuestra que la pobreza que aumentó durante la pandemia se ha cronificado. "Volvemos a los mismos niveles que antes del estallido del covid, la pobreza estructural no mejora", lamenta la Taula en un comunicado.

Rostro de niño

Por edades, los niños vuelven a ser las grandes víctimas de la pobreza en Catalunya. Un 32% de los menores viven bajo el umbral de la pobreza, prácticamente la misma que el año pasado. El 19% de jubilados y el 24% de adultos viven también bajo la escasez de recursos. "Estos datos muestran que los instrumentos de lucha contra la pobreza, como la Renta Garantizada, no son efectivos para mejorar la situación de las familias vulnerables", opina Save The Children, que cuenta hasta 378.500 menores pobres en Catalunya. La organización recuerda que criar a un niño en Catalunya cuesta 819 euros al mes. "Para los hogares más empobrecidos esto es directamente imposible", se queja en un comunicado en el que reclama complementos económicos para la crianza para las familias más vulnerables.