Derechos

Educació anuncia más monitores de apoyo tras las críticas de las familias

 Las escuelas públicas catalanas pasarán de disponer de 47.000 horas de cuidadores en el curso 2021-2022 a las 54.000 horas del curso actual 

La 'conselleria' da el dato días después de que las familias se organizaran para denunciar la falta de recursos para la aplicación del decreto de la escuela inclusiva

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A1-144624880.jpg / ZOWY VOETEN

El Periódico

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El Departament de Educació ha hecho público este viernes un comunicado en el que explica el incremento para este curso escolar las horas de servicio de monitores de apoyo para el alumnado con necesidades educativas especiales. Un aumento que supondrá, según la misma nota, un 15% más de horas destinadas al apoyo de este alumnado en los centros educativos públicos. Así, se pasará de las 47.000 horas del curso 2021-2022 a las 54.000 horas del curso actual, unas 7.000 horas semanales más.

La 'conselleria' hace pública esta cifra pocos días después de que las familias se organizarán y, arropadas por la aFFac, denunciaran que cinco años después de la aprobación del decreto, y uno después de la fecha límite establecida para su completo despliegue, la educación inclusiva sigue sin ser una realidad. Cada día se hace público un nuevo caso de una criatura a la que le son vulnerados sus derechos por la falta de recursos en la educación inclusiva.

Los monitores y monitoras de apoyo para el alumnado con necesidades educativas especiales es personal imprescindible para atender a estos niños y niñas en relación con las tareas de cuidado y de higiene personal o las de acompañamiento en los traslados.

La distribución de los monitores, prosigue el citado comunicado del Departament, "se realiza en función de las necesidades del alumnado detectadas por el equipo de asesoramiento psicopedagógico" y se asignan a cada centro educativo.

A través del anunciado refuerzo -que las familias siguen considerando insuficiente- el objetivo de la 'conselleria' es, según señala el comunicado, "favorecer la autonomía personal y la autorregulación del alumnado con necesidades educativas especiales dentro de los centros educativos, y al mismo tiempo mejorar la participación y la realización de las actividades de aprendizaje en contextos ordinarios y dentro del horario lectivo".

El pasado 5 de octubre, las decenas de entidades que forman parte de la Federación Catalana de Autismo, que representa a 12.000 familias del colectivo autista de toda Catalunya, hizo también público un duro manifiesto en el que lamentantaban la falta de inclusividad del sistema educativo.