Iniciativa empresarial

De construir casas a cosechar lúpulo

¿Por qué la estrella es el símbolo de la cerveza?

Marius Ovidiu es payés y forma parte del proyecto que Damm impulsó en el 2014 para estudiar la viabilidad de cosechar lúpulo en Prades (Baix Camp)

Marius Ovidiu

Marius Ovidiu / Oriol Alella

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Las cervezas de Damm tienen algo del alma de Marius Ovidiu. En 2009, llegó a Prades (Baix Camp) procedente de Rumanía, donde se dedicaba al sector de la construcción. Una vez aquí, tuvo su primer contacto con la tierra plantando avellanos y patatas, hasta que en 2014 Damm le propuso formar parte de un proyecto innovador. La cervecera quería estudiar la viabilidad de cultivar lúpulo mediterráneo en Prades, una región con un clima y una tipología de terreno muy similares a los de las grandes regiones productoras de lúpulo a nivel mundial.

Después de años de observación y diferentes fases de cultivo, se identificó que la variedad amarga Nugget era la que mejor se adaptaba al terreno y se inició el cultivo del lúpulo de Prades.

Y aquí es donde Marius toma protagonismo haciendo de payés en las fincas que Damm gestiona en Prades, supervisando el cultivo en todo su proceso. “Ha sido un proceso de aprendizaje intenso, el primer año no conocía nada del lúpulo y ahora somos expertos. En el campo vivo tranquilo, en contacto con la naturaleza y haciendo un trabajo que me apasiona y que nunca imaginé que haría”, dice Marius.

En Prades se cosecha la variedad Nugget, y ahora también crecen la Centennial y la Willamette

Ahora bien, en las historias personales siempre hay un nexo que une el pasado con el presente, y en el caso de Marius es una afición de su madre: “Cuando vivíamos en Rumania mi madre hacía en casa cerveza con lúpulo salvaje que recogía en los barrancos”. De hecho, su conexión con esta planta es tan fuerte que asegura que hacer de payés y cultivar lúpulo es el trabajo que quiere realizar hasta que se jubile. Tiene 45, y por tanto, mucha cuerda para ver cómo Prades puede llegar a consolidarse como el gran epicentro del lúpulo en Catalunya.

A parte de la variedad Nugget, en Prades justo ahora empiezan a crecer -con éxito- otras dos variedades de lúpulo: la Centennial y la Willamette. En Prades la cervecera también prepara el lúpulo para ser enviado a sus instalaciones de El Prat de Llobregat donde se utilizará para dar amargor, aroma y sabor a sus cervezas.