La Generalitat aparta a la fundación que gestionó el geriátrico de Tremp con 61 muertos

La Fundación Fiella, gestora de la residencia de Tremp (Pallars Jussà) donde murieron 61 ancianos (la mitad) por un brote descontrolado de coronavirus, ha sido apartada del geriátrico para los próximos cuatro años. Esta es la decisión del Govern tras las "graves carencias detectadas" cuando el centro estaba a manos de esta entidad religiosa. La fundación que gestionó el centro tras la intervención del Govern, la orden religiosa Sant Joan de Déu, será quien se haga cargo de los ancianos los próximos cuatro años. Una noticia que ha avanzado eldiario.es y que ha podido confirmar EL PERIÓDICO.

Fue el 28 de noviembre de 2020 cuando la fundación Fiella de Tremp fue apartada temporalmente de la gestión de la residencia de Tremp. En aquel momento, prácticamente la mayoría de ancianos y una gran parte de la plantilla estaban contagiados de coronavirus, y el reguero de defunciones ya había empezado. Finalmente fueron 61 ancianos los que allí perdieron la vida en tan solo un mes, prácticamente la mitad del total de internos. Los familiares denunciaron que los residentes habían estado desatendidos, y la plantilla pedía auxilio porque no había personal.

Quien asumió primero la gestión de la residencia fueron los gestores del Hospital Comarcal del Pallars, a escasos metros del geriátrico. Pasadas las fiestas navideñas la gestión pasó a manos de la fundació Sant Joan de Déu de Lleida. La antigua directora del centro fue cesada y otra trabajadora del geriátrico asumió las labores directivas. Hace dos meses la fundación Fiella confiaba en "recuperar pronto" la gestión de su residencia. Lo verbalizó en una carta dirigida a los familiares de los fallecidos aunque jamás les pidió perdón.

Ya entonces, la Generalitat quiso dejar claro que pasaría mucho tiempo hasta que Fiella recuperara la gestión del geriátrico. Fuentes de la Conselleria d'Afers Socials explican ahora que tras las "graves carencias" detectadas, anunciaron a la fundación Fiella que no estaban capacitados para estar al mando del geriátrico en estos momentos. Se da la circunstancia que la residencia de Tremp es un centro privado, aunque el 'departament' tiene compradas algunas camas para beneficiarios de la ley de dependencia. Así pues, tuvo que ser la fundación Fiella quien decidiera quienes serían sus sustitutos para los próximos cuatro años, contando siempre con el visto bueno del Govern. Propusieron la entidad religiosa Sant Joan de Déu y la 'consellería' aceptó.

El procedimiento administrativo no ha terminado del todo. Al margen de estar apartados de la residencia hasta 2025, aún se desconoce la sanción que impondrá el Govern por las deficiencias detectadas. Además, falta por saber cómo termina el procedimiento penal de tal suceso. La fiscalía de Lleida está investigando a la fundación Fiella por posible homicidio imprudente. Y es que aparte del enorme dolor generado en toda la comarca por las letales consecuencias del brote, la gestión del centro fue más que polémica. Salut intervino tarde, después de saber y ver que se incumplían las restricciones sanitarias y los protocolos para evitar una mayor propagación del virus. Luego algunos trabajadores confesaron que tampoco se habían mantenido las medidas sanitarias con anterioridad, algo que ya han explicado a los Mossos que les han interrogado.

Según explican fuentes de la fiscalía de Lleida, la semana pasada los Mossos de la comisaría de la Seu d'Urgell, que es sobre quien recae la investigación, tuvieron por fin acceso a toda la documentación sobre la gestión del geriátrico. Entre ellos, contratos de los trabajadores o la formación recibida para atender a los pacientes en plena pandemia. Ahora la fiscalía espera el atestado de los Mossos, que podría concluir en un escrito de acusación ante el juez por homicidio imprudente.