Coronavirus: Hospitales no tan provisionales

Han llegado para quedarse, unos al menos hasta otoño y otros incluso a largo plazo. No hay fecha de caducidad para las instalaciones hospitalarias que las comunidades autónomas levantaron en el peor momento de la crisis sanitaria del coronavirus, aunque algunas aún ni se hayan inaugurado por el descenso de la presión asistencial.

La idea general es que casi todas se queden preparadas para unas hipotéticas nuevas olas de contagio, ya sean en cuestión de semanas por el desconfinamiento o tras el verano por el regreso de la pandemia.

La próxima DANA

Pero hay quien ha ido algo más allá. Es el caso de la Generalitat Valenciana que, tras haber sufrido los devastadores efectos de la DANA (o gota fría) y de la tormenta 'Gloria' en pocos meses, apostó más a largo plazo por hospitales 'reutilizables'.

Con una inversión de 4,8 millones de euros se decantó por tres centros modulares desmontables, uno junto al hospital de referencia de cada provincia, que cuando la pandemia esté completamente superada pasarán a la Agencia de Seguridad y Emergencias para que les dé uso ante catástrofes climáticas.

"Como mínimo estarán ahí hasta final de año, después volveremos a evaluar la situación", explicó la 'consellera' valenciana Ana Barceló, tras una visita al que se ha construido junto al Hospital La Fe.

La 'consellera' Gabriela Bravo, de la que depende la agencia de seguridad, apuntó que contar con estas instalaciones "supone una fortaleza ante cualquier crisis climática que nos obligue a evacuar la población de forma rápida" y explicó que los bomberos de la Generalitat ya han participado en este primer montaje para que luego puedan ser ellos los que lo asuman.

"Cuando planteamos el proyecto lo hicimos desde la doble ventaja que aportaba de servir de soporte sanitario, de ampliación de capacidad, y de disponer de estructuras modulares polivalentes en una situación de emergencia climática", señaló Bravo, que destacó que así no se hipotecan otros espacios como polideportivos o ferias.

Fira y Sant Pau

De momento, los tres recibirán pacientes leves contagiados de covid-19 que hayan tenido una buena evolución en otros hospitales, pero también aquellos que, aun pudiendo estar en casa, no se han ido por no poderse garantizar una correcta cuarentena que no ponga en riesgo a su entorno. Igualmente servirán para hacer tests masivos.

La idea, como pasa con el hospital temporal en el pabellón 4 del recinto Gran Via de Fira de Barcelona, que se acabó esta semana en L'Hospitalet con 300 camas ampliables a 1.000, es que puedan rebajar la presión asistencial de los centros más saturados pero sin descartar que tengan un uso más decisivo en breve.

"Tenemos por delante dos fases muy complejas. Una de ellas, todavía incierta, es qué va a pasar con la vuelta de los trabajadores a las empresas dentro de 15 días y la otra es el desescalado", advirtió Barceló.

Tampoco otras infraestructuras que sí que llegaron a tener un uso en el pico como por ejemplo el pabellón habilitado junto al Hospital Sant Pau de Barcelona van a desmontarse de momento pese a que los pacientes que aún están allí se pueden contar con los dedos de una mano.

Ifema

De todos los hospitales provisionales abiertos el más grande ha sido el construido en Ifema. En el recinto ferial de Madrid llegó a haber 1.500 ingresados en el momento álgido de la crisis, cuando la capacidad hospitalaria de la capital estaba desbordada.

Pero, reconducida la situación y aunque este viernes se cerró el pabellón 7 ante la bajada de la presión asistencial y se agrupó a todos los pacientes en el pabellón 9, no está claro su futuro.

La previsión que tiene la Comunidad de Madrid es la de poder cerrar también esa última ala a finales de mayo pero aunque la idea inicial era mantener la infraestructura al menos hasta comprobar la evolución de la pandemia una vez pase el verano y vuelva el frío, la presidenta Isabel Díaz Ayuso aseguró este domingo que estudia alternativas para no perder recursos y 'desocupar' el recinto.

De hecho, aunque hace días que se cerró por falta de pacientes el pequeño hospital que con la ayuda de Médicos Sin Fronteras se montó en Leganés con tiendas de campaña, la consejería ha pedido también que se quede en pie. Nadie se fía del covid-19.