Una empresa de Sabadell construirá el primer hotel de cinco estrellas del desierto Erg Chebbi de Marruecos

Una empresa de Sabadell (Vallès Occidental) se lanza a hacer historia en el mercado turístico de Marruecos. El emprendedor Lluís Pont trabaja en la construcción de nuevos hoteles en Marruecos, concretamente el primer alojamiento de cinco estrellas oficialmente reconocido como tal en el desierto de Erg Chebbi el que finalizará a finales de 2024.

Se trata de la agencia familiar de viajes Grup Xaluca, muy conocida en la cocapital vallesana, que tiene un pie en Catalunya y el otro en Erfoud (Marruecos). Esta dualidad proviene de su especialización pionera en el sur del país africano, donde construirá los hoteles Xaluca Midelt y Xaluca Dunes. 

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Pont, sabadellense y copropietario de la agencia, inició las andanzas de la firma en Marruecos con un primer albergue frente a las dunas de Merzouga. Ahora, casi treinta años más tarde, acaba de inaugurar un resort de montaña y proyecta dos cinco estrellas en otras regiones del país. Uno de ellos, el Xaluca Dunes, será el primero de estas características en el desierto Erg Chebbi, certificado por la Oficina de Turismo del país. "En Google salen anunciados algunos alojamientos con la etiqueta 'cinco estrellas', pero no están registrados oficialmente por esta entidad", aclara Pont.

Añade que “gracias a la creciente popularidad de Marruecos como destinación turística", una agencia local como esta ha podido expandirse y desarrollar recursos in situ. La apuesta por el lujo, señala, responde a la aspiración de diferenciarse de “la competencia” y atraer turismo de calidad.

El Xaluca Dunes trasladará a los viajeros a la mítica ciudad de Tombuctú y su arquitectura en barro. La pandemia les hizo dudar sobre seguir adelante o no con los planes, pero finalmente se atrevieron empujados por el "romanticismo" del proyecto. "La estructura del hotel rezumará África en estado puro”, presume el empresario.

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Por otro lado, Xaluca proyecta otro hotel en la región de Midelt, a medio camino entre las ciudades de Fez y Erfoud, al pie del Atlas medio. Es una apuesta un tanto arriesgada, al haber elegido un territorio actualmente poco visitado.

Para el empresario de Sabadell, los hoteles de estas dimensiones en Marruecos no tienen por qué ser disruptivos para la población local y las formas de vida más tradicionales: “Es imprescindible respetar el entorno, el medioambiente y las costumbres. No queremos dar el típico servicio descontextualizado, sino de alguna manera adentrarnos y camuflarnos en África”, argumenta. Además, sostiene que el Ministerio de Turismo de Marruecos es “extremadamente exigente” con la catalogación de los hoteles del país.

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Un destino al alza

Marruecos se ha convertido en un imán de visitantes de todo el mundo. El mismo Ministerio de Turismo de Marruecos estima que en 2022 el país acogió a unos 11 millones de turistas, mientras que en 2023 la cifra creció un 36% con la recuperación poscovid. Este hecho queda reflejado también en la expansión hotelera en el país: “La demanda turística contribuye a que mejoren las infraestructuras y las carreteras del país”, asegura. 

Recientemente la empresa vallesana ha inaugurado el Hotel Xaluca Spa Aguelmame Sidi Ali, situado a orillas del lago homónimo y rodeado de bosques de cedros centenarios. La finca había sido un refugio de caza y pesca y la empresa sabadellense, junto a profesionales locales, la ha convertido en un ‘hotel boutique’ de alta montaña para cientos de viajeros que busquen una estancia de descanso. Según Pont, con los beneficios de los hoteles que ya tienen financiarán las futuras inversiones.

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