El PSOE rebaja el efecto en la gobernabilidad de Sánchez tras las catalanas: “No repercutirá”

Ferraz confía en una cuadratura del círculo que pasa por conseguir la presidencia de la Generalitat y afianzar la gobernabilidad de la legislatura. La sensación en la sede federal es de euforia tras romper la mayoría independentista y validar su hoja de ruta sobre el diálogo con los independentistas, justificando decisiones arriesgadas como la ley de amnistía. De hecho, reconocen su entusiasmo y lo contraponen a un “shock” de las formaciones independentistas. Por eso entienden que tanto Junts, como sobre todo ERC al tener la llave de un pacto progresista, deberán “madurar” ahora su reflexión sobre los resultados para llegar a la conclusión de que no les interesa mantener el bloqueo, forzando una repetición electoral. Ni mucho menos hacer caer al Gobierno, que sigue pendiente de aprobar sus primeros Presupuestos de la legislatura.

En privado, fuentes de la dirección del PSOE niegan que los independentistas tengan incentivos para romper sus acuerdos y abrir la puerta a un cambio de Gobierno. En público, la portavoz del PSOE, Esther Peña, hizo una minuciosa lectura de los resultados para concluir que “a todas luces son incontestables”. De ahí la confianza en la dirección del partido de que, ya en frío y una vez pasadas las elecciones europeas, los independentistas sepan leer el viraje de la sociedad catalana para acompañar ellos mismos con sus políticas este proceso sin desentenderse de la nueva realidad electoral.

A la espera de la revisión de estrategias y con el riesgo de bloqueo sobre la mesa, Peña vaticinaba que las elecciones catalanas de este pasado domingo “no tendrán ninguna repercusión en la gobernabilidad”. Para ello, subrayó que hay una serie de acuerdos de investidura que el PSOE cumplirá. Además, “no hay alternativa a Pedro Sánchez, que vio validada su hoja de ruta”, por lo que concluyó sin ninguna duda de que habrá “continuidad” del Ejecutivo.

Si los independentistas mantienen su apoyo, la duda será a qué precio lo hacen. El PSOE está ahora poniendo el foco en las “cosas del comer” y la economía. Asimismo, se han reafirmado en su negativa a un referéndum. Durante la precampaña, los socialistas ya acotaron el margen para pactar tras las catalanas, al cerrar la puerta a los dos asuntos mollares incluidos en los acuerdos de investidura que se preveían abordar tras la aprobación de la amnistía, como la financiación o el “futuro político de Cataluña” que pueda ser “refrendado por el pueblo catalán”. Al mismo tiempo, y ya en clave de campaña de las europeas, Peña ha insistido en la idea de un “patriotismo útil” para cohesionar y no para romper.

“Hay un patriotismo más allá de pulseritas. Un patriotismo que trabajar para unir y servir. El patriotismo es más que una bandera. No es patrimonio de la derecha y la ultraderecha, y es saber llevar al país a avances sociales y a la convivencia”, argumentó. Pese a la confianza de los socialistas de cuadrar el círculo estabilizando la legislatura tras la ruptura de la mayoría independentista, el Ejecutivo deberá hacer grandes equilibrios para estabilizar la legislatura. Por lo pronto, deberá a esperar a que se resuelva la gobernabilidad en Cataluña.

El coste del "bloqueo"

Si la lectura de los socialistas es que ERC aguantará la presión de Junts para evitar una repetición electoral, no han dejado de enviar mensajes indirectos sobre los efectos de forzar este escenario. “Se penaliza a quien bloquea, en todos los ámbitos”, concluyó Peña sin querer precisar luego a formación se referían. Según sus cálculos, sin embargo, no suele haber mucho movimiento de voto si los ciudadanos vuelven a ser llamados a las urnas y, en todo caso, se repetiría el mensaje de que se quiere "pasar página".

El Gobierno prorrogó las cuentas públicas por la imposibilidad de pactarlos con ERC y Junts en periodo electoral y su objetivo pasaba por comenzar a trabajar en los del próximo año después de las europeas del 9 de junio. Sin Presupuestos, la legislatura de Pedro Sánchez entraría en barrena y su aprobación ni queda resuelta ni parece más fácil después de este domingo. Al menos a corto plazo. Un hipotético entendimiento del PSC con ERC alejaría a Junts de Pedro Sánchez y viceversa.