Elecciones municipales 2023

El PSC llama a concentrar el voto en la "auténtica izquierda" para garantizar el fin de la era Colau

Todo lo que está pasando en esta campaña de elecciones municipales, en directo

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Jaume Collboni: "Está en riesgo que las cosas continúen igual de mal o sufrir una regresión en la ciudad"

El candidato del PSC, Jaume Collboni, y la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, en un mitin en La Marina de Port

El candidato del PSC, Jaume Collboni, y la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, en un mitin en La Marina de Port / JORDI OTIX

Sara González

Sara González

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Tomando como metáfora un Salvador Illa a la carrera por la Barceloneta el sábado, el PSC esprinta y define la recta final de la campaña como "la semana del cambio". Conscientes de que hay una bolsa de indecisos que el 28 de mayo decantarán la balanza a favor de un candidato u otro, los socialistas catalanes se erigen en "la auténtica izquierda" izando la bandera del Gobierno de Pedro Sánchez y piden concentrar el voto de todos aquellos que quieren que Ada Colau deje de ser alcaldesa. "Que nadie malbarate ni un solo voto del cambio. El voto al PSC va directamente al inicio de una nueva etapa", se ha desgañitado Jaume Collbonidesde La Marina de Port, un barrio que en el último ciclo electoral se ha teñido siempre de rojo.

Si una cosa busca el PSC es que el votante no le identifique con el actual gobierno municipal, pese a que los socialistas siguen siendo socios de los Comuns en la capital catalana. Collboni, que dejó el ayuntamiento hace solo cuatro meses para diseñar una campaña de confrontación con Colau, no solo define su candidatura como la "alternativa progresista", sino que ha advertido de que el riesgo que corre la ciudad es que "las cosas continúen igual de mal" -una enmienda a la totalidad al actual mandato- o que sufra una "regresión", en referencia a la opción que supone Xavier Trias como alcaldable de Junts.

La lectura que hacen en la sala de máquinas de los socialistas con encuestas y trackings internos sobre la mesa es que "Trias se deshincha" y que su principal cuerpo a cuerpo es ahora con los Comuns. Los dos teloneros de Collboni, el exalcalde Jordi Hereu y la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, han mordido especialmente por aquí. El exalcalde ha cargado contra "el culto a la personalidad" que indica que tanto Colau como Trias hayan recurrido a poner su imagen en la papeleta.

"Poner la cara del candidato en la papeleta denota la poca consistencia que hay detrás del movimiento político. Esto, ni Pasqual Maragall lo hubiera aceptado nunca"

Jordi Hereu

— Exalcalde de Barcelona

"Denota la poca consistencia que hay detrás del movimiento político", ha espetado, además de tachar de "rostro peronista" a la líder de los Comuns. "Esto, ni Pasqual Maragall lo hubiera aceptado. A nosotros no nos hace falta poner caras, el puño y la letra nos identifica a todos", ha zanjado. Unos, ha continuado en referencia a sus socios de gobierno, viene "del observatorio" con "teorías abstractas de gente que vive demasiado bien", mientras el PSC es el partido de la gente "que viene de la fábrica y de la cultura del trabajo". Y a Trias le ha achacado que una "Diagonal para pijos" sea su herencia.

Batet carga contra el Govern

La presidenta del Congreso ha hurgado en la "gesticulación" de la izquierda que ha sumido a Barcelona en la "resignación", pero Batet ha sido especialmente contundente contra el Govern, a quien ha acusado de no haber "hecho nada" por el derecho a la vivienda pese a tener competencias para ello. "Quieren competencias y no son capaces de gestionarlas", ha recriminado al ejecutivo de Pere Aragonès. Precisamente, el Parlament aprobó una ley de vivienda para regular el precio de los alquileres en 2020, pero la Moncloa la recurrió al Tribunal Constitucional bajo el argumento, precisamente, que excedía de sus competencias. Desde Girona, Illa cargó también contra el Govern y pidió una "movilización máxima" para lograr un vuelvo electoral en los municipios y que Catalunya "deje de refunfuñar".

Ahora, el PSOE se otorga la paternidad de la ley de vivienda aprobada en el Congreso y pactada también con ERC, así como de los 580 millones de inversión en los CAP anunciados por Sánchez. La agenda del Gobierno sirve a Collboni para reivindicarse como el embajador de Sánchez en Barcelona. "A los jóvenes que votáis por primera vez: ¿Cuál es el partido y quién es el presidenta del Gobierno que piensa más en ellos?", ha asegurado. Y no en vano ha recordado que el viernes el PSC contará tanto con Sánchez como con el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero para poner el broche a la campaña desde el pabellón de la Vall d'Hebron, donde buscan proyectar una imagen de fuerza antes de pasar por las urnas.

Además de presumir de las mejoras que se podrán hacer en los CAP de los barrios gracias a la inyección prometida por el presidente del Gobierno, Collboni ha hecho mención explícita a proyectos en La Marina de Port, que los socialistas definen como "la Ohio de Barcelona", porque el resultado aquí es una radiografía a pequeña escala de lo que sucede en el resto de la ciudad. Ha prometido ser exigente con la Generalitat para pedir "más metro" para mejorar la conectividad del barrio y una nueva línea de autobús de "altas prestaciones", la H20, para unirla con el centro de la capital. En La Marina, los socialistas han ganado en todas las convocatorias del último ciclo electoral, un enclave en el que Collboni confía en disparar los votos. O, como ha dicho Hereu, desde donde se lanzará "el cohete Collboni".