Polémica en las redes

Junts estudia si sanciona al colaborador de Laura Borràs que impulsó la cuenta falsa de Joana Masdeu

El partido considera que Dalmases "ha admitido" que intimidó a una periodista y por ahora da el caso "por cerrado"

La presidenta de Junts, Laura Borràs, y el secretario general del partido, Jordi Turull.

La presidenta de Junts, Laura Borràs, y el secretario general del partido, Jordi Turull. / FERRAN NADEU

Sara González

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La comisión de garantías de Junts estudiará si sanciona al asesor de Laura Borràs que impulsó la cuenta falsa en Twitter de la supuesta periodista Joana Masdeu para defender al diputado Francesc de Dalmases. 'Nació Digital' acreditó que el usuario creado, que fue suprimido cuando profesionales de medios de comunicación y dirigentes como Jordi Sànchez dejaron en evidencia que era un 'fake', estaba vinculado al teléfono móvil de Rai López, miembro del Consell Nacional del partido y que se presenta como adjunto al secretario de organización de Junts, David Torrents.

Así pues, el mismo órgano que elaboró el informe interno sobre la intimidación de Dalmases a una periodista de TV-3 tendrá ahora sobre la mesa la decisión de si amonesta o, como piden algunas voces del partido, se aparta al colaborador de Borràs. "Está en sus manos intentar aclarar los hechos", ha informado el portavoz de Junts, Josep Rius. La presidenta de la comisión de garantías, Magda Oranich, ya denunció haber recibido presiones por parte de Borràs y de su órbita para cambiar el sentido de la investigación sobre Dalmases, que ratificó la conducta del dirigente el pasado 9 de julio en los estudios de la televisión pública.

Este viernes, Rius ha considerado que el diputado, que dimitió como vicepresidente del partido la semana pasada pero que mantiene su escaño, "vino a admitir los hechos" en la carta que envió ayer a la comisión del estatuto del diputado, que ha puesto en marcha el proceso para sancionarlo. Rius ha asegurado que en la reunión de la ejecutiva del jueves por la tarde no se habló de la situación de Dalmases y tampoco de las afectadas que, a través de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA, han manifestado que se han visto perjudicadas por la conducta del dirigente. "Con su dimisión lo damos por cerrado", ha afirmado.

Lo que sí que abordó la reunión de la dirección es la sustitución de Dalmases como vicepresidente del partido. Borràs ha propuesto que sea Jordi Fàbrega, vicealcalde de La Seu d'Urgell y diputado en el Parlament, quien asuma el cargo que quedó vacante. La propuesta deberá ser ratificada por los afiliados de Junts.

La negociación de las cuentas

Más allá de estas polémicas y con la agenda política encima de la mesa, Junts afronta la negociación de los presupuestos tras la primera reunión el miércoles con el Govern de Pere Aragonès. Los posconvergentes, que ya no plantean como condición 'sine qua non' para negociar una cuestión de confianza que continúan considerando necesaria, han anunciado que propondrán al Govern un decálogo con medidas sociales y fiscales. El encuentro con la 'consellera' Natàlia Mas y la 'consellera' Laura Vilagrà, ha detallado Rius, sirvió para conocer las cifras generales del presupuesto pero no las concretas. Además, aseguran que tampoco aclararon con qué apoyos piensa aprobar las cuentas un Executiu que continúa contando solo con los 33 diputados de ERC.

Otra de las carpetas es la reforma de la sedición que el Gobierno está negociando con ERC. Junts ha insistido que todo lo que no sea eliminar el delito supone "blanquear la represión" y seguir penalizando la convocatoria de referéndums. El partido también ha denunciado la actitud de la Junta Electoral Central por cuestionar la condición de eurodiputado de Carles Puigdemont, Clara Ponsatí y Toni Comín. "La JEC vuelve a hacer el ridículo", ha espetado Rius, que ha recordado que la condición de eurodiputados fue reconocida el 13 de junio del 2019 con el aval del Tribunal General de la Unión Europea. La semana que viene, los diputados de Junts en el Parlament, el Congreso y el Senado se desplazarán a Bruselas para reunirse con Puigdemont y abordar lo que consideran "una nueva campaña contra el exilio".