Convergència i Unió, mil y una crisis

Por la elaboración de las listas para las elecciones municipales, por el perfil a marcar en el Congreso de los Diputados, por el posicionamiento en torno al proceso soberanista, por la distribución de los cargos... Las crisis entre Unió y Convergència, entre Convergència y Unió, parecen haberse convertido en algo inherente a la propia federación. Estos son algunos de sus encontronazos más sonados de los últimos tiempos.

LOS CANDIDATOS DEL 24-M

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La designación de los cabezas de lista de CiU para los comicios locales ha hecho saltar chispas entre los dos socios en algunos municipios. En localidades como Vic hubo semanas de negociaciones hasta que se llegó a una entente. En Perelada, Roses y la Bisbal d’Empordà se presentaron candidaturas alternativas.

Unión de conveniencia

EL PACTO ANTIYIHADISTA

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 Mientras los diputados de Unió votaron a favor del acuerdo suscrito por PP y PSOE, los de Convergència decidieron abstenersePPPSOE. Los democristianos recordaron que la federación había decidido apoyar la norma, a pesar de estar en desacuerdo con ella, a la espera de poder cambiarla con enmiendas. A partir de ahí, el intercambio de acusaciones fue subiendo de nivel. Regidores convergentes atacaron con dureza al líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, y la cúpula de CiU trató de cerrar el conflicto con elogios a Duran.

LA HOJA DE RUTA

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Las declaraciones de Duran cuestionando la hoja de ruta soberanista diseñada por Artur Mas y las contradeclaraciones de la cúpula convergente arremetiendo contra el dirigente de Unió por frenar al ala más independentista de los democristianos han sido una constante. “El líder de Unió asegura que CiU no plantea un referendo sobre la secesión”, subtitulaba una noticia de este diario del 28 de septiembre del 2013. “Duran y Convergència airean sus diferencias en torno a la consulta”, era entonces el título.

LAS ELECCIONES DEL 27-S

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Dirigentes de CDC han acusado a Duran de intentar torpedear el proceso soberanista y al propio ‘president’ Mas al cuestionar sus planes en numerosas ocasiones. El líder de Unió, por ejemplo, siempre ha pedido agotar la legislatura y ha renegado de los posibles pactos con ERC. Su número dos, Ramon Espadaler, espetó el 14 de febrero, en plena crisis de la federación, que su partido “no será un simple apéndice” de las negociaciones entre CDC y Esquerra.

LA CONSULTA DEL 9-N

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Tras un suspense de varias semanas, Duran fue finalmente a votar (un sí-no) el 9 de noviembre 9 de noviembre , pero antes de ello también lanzó algún dardo a sus socios en torno a la fórmula elegida. Un mes antes había rechazado un posible sucedáneo de la consulta y apuntó que había que "hacer las cosas bien y no hacer el ridículo".

LA ABDICACIÓN DE DURAN

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Las malas relaciones con sus socios de CDC llevaron a Duran a renunciar a la secretaría general de CiU secretaría general . A muchos mandos convergentes les costó esconder una taimada sonrisa, lo que llevó a dirigentes democristianos a reclamar respeto a sus compañeros.