Ágora

El Vallès, en la carrera aeroespacial

El New Space catalán factura alrededor de 200 millones de euros y se prevé que en dos años el sector aeroespacial en Catalunya facturará 540 millones de euros

Enxaneta en órbita

Enxaneta en órbita / EL PERIÓDICO

Marta Farrés y Xavier Roca

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Malacostumbrados como estamos a mirar a corto plazo, a menudo olvidamos lo que decía el dicho africano: “Si quieres caminar muy rápido, ve solo; pero si quieres llegar lejos, ve acompañado”. Las apuestas y las inversiones más productivas y beneficiosas para la sociedad suelen ser las que se cuecen con tiempo, porque son las que finalmente generan cambios virtuosos. En 2004, un equipo de profesores y profesoras de Terrassa, liderados por el director Jaume Gibert, logró el encargo oficial de la Generalitat de Catalunya y de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) de formar, por primera vez en la historia de Catalunya, ingenieros e ingenieras aeronáuticos. Cinco años después se graduaba en la UPC la primera promoción, la semilla de un sector industrial de gran valor añadido y que ahora es más que emergente.

Casi 20 años después creamos el Hub Aeronáutico de Sabadell, que ya ha dado los primeros frutos: como la llegada de la Escola de Controladors y el anuncio de Celestia Aeroespace, la primera empresa que enviará nanosatélites al espacio con aviones, que instala en Sabadell su sede. Fabricará 300 nanosatélites cada año y creará 350 puestos de trabajo, la mayor parte de cariz tecnológico. Este ‘hub’, liderado por el Ayuntamiento de Sabadell e impulsado por AENA, el Consorci de la Zona Franca y la UPC, está trabajando para impulsar diferentes empresas e instituciones catalanas vinculadas con el sector aeroespacial. En Sabadell hemos entendido perfectamente la suerte de disponer de unas instalaciones como las del aeropuerto, generadoras de oportunidades y riqueza para la ciudad y su entorno.

Alguien puede pensar que esto será lluvia de un día, que el ejemplo es un caso aislado. Nada más lejos de la realidad. Catalunya lleva años apostando por el sector aeroespacial y el Vallès es un gran activo en esta apuesta de futuro. Según un estudio de la Cámara de Comercio de Barcelona, el New Space catalán factura alrededor de 200 millones de euros y se prevé que en dos años el sector aeroespacial en Catalunya facturará 540 millones de euros.

‘Enxaneta’ y ‘Menut’, los dos primeros satélites del Govern de la Generalitat de Catalunya lanzados al espacio, han sido construidos por una empresa fundada por ingenieros e ingenieras formados y graduados en el Vallès. Otros estudiantes han lanzado el cohete universitario más potente de España y son ya el grupo de referencia de la Agencia Espacial Europea (ESA) para los lanzamientos de nanosatélites del concurso Cansat. Universitarios aeronáuticos del Vallès han creado una ‘start-up’ que está desarrollando un sistema de propulsión eléctrica para satélites de baja órbita. Investigadores de la Escola han puesto en órbita unos dispositivos únicos para estudiar los rayos. Universitarios vallesanos batieron el récord de vuelo de un avión solar no tripulado. Incluso ESA encarga cada año a nuestra escuela la organización en Catalunya del concurso de nanosatélites Cansat. Y podríamos seguir con muchos más ejemplos.

Estos 20 años de historia del sector aeroespacial en Sabadell y en el Vallès solo son la base de la que partimos. Contamos con todos los elementos para la gran eclosión futura: el entorno económico e industrial más competitivo y activo del país, la formación de profesionales, el talento que liderará el sector y las voluntades políticas. Tres ejes sobre los que Sabadell y la UPC en el Vallès quieren construir el polo de la industria aeronáutica catalana.