Sobre una supuesta conquista de Barcelona

El lunes se produjo la novedad de que el mal llamado Estado Islámico emitió un vídeo de casi tres minutos dirigido a los barceloneses. Bajo el título 'La conquista de Barcelona', hablaron en castellano dos miembros de este grupo terrorista, vestidos con ropa militar, uno a cara descubierta y con un físico peculiar y el otro con un pasamontañas que solo permitía verle los ojos. El primero tenía una dicción bastante clara y el segundo se hacía entender con dificultad.

Arropados con canciones y marchas bélicas en lengua francesa y con una voz en off en árabe que amenaza con no dejarnos tranquilos si España no sale de la coalición internacional liderada por Estados Unidos que lucha en territorio sirio e iraquí, los dos terroristas se presentan como "soldados del Estado Islámico" y bajo los nombres de Abú Lais al Qurtuba (es decir, el de Córdoba) y de Abú Salman al Andalusí, sin que ninguno de los dos tenga acento andaluz. El primero dice que si sus posibles seguidores no pueden trasladarse a territorio del Estado Islámico, deben practicar la yihad donde sea, porque este no tiene fronteras. Así, añade, "Dios estará complacido por vosotros".

Llama la atención que cuando habla de la marcha hacia Oriente utilice la palabra 'hijra', que traducimos por hégira y que tradicionalmente se ha dado a la emigración de Mahoma y de sus primeros seguidores, en el año 622, desde La Meca hacia Yathrib, la ciudad que ahora conocemos por Medina. Allí nació el primer gobierno islámico encabezado por el Profeta y los cuatro primeros califas del islam.

A continuación amenaza a los cristianos españoles pidiendo que no olviden la sangre de los musulmanes derramada por la "Inquisación" (sic, por Inquisición) española, añade que vengarán las matanzas actuales y exige que se deje la guerra contra su Estado.

Vídeo de peor factura

Es curiosa la errónea creencia de que la Inquisición condenó a muerte a judíos y musulmanes, porque este terrible y entonces llamado Santo Tribunal contra la Herética Pravitat solo podía actuar contra los considerados malos cristianos y no contra los fieles de otras religiones. Es cierto que muchas de sus víctimas habían sido bautizadas por la fuerza y tenidas por católicas de entonces en adelante. También es cierto que la gran mayoría no habían sido instruidas en la nueva fe impuesta y desconocían su práctica, dogmas y ritos. Un buen ejemplo puede ser el de Nofre Cudeydel, de antiguo nombre islámico Azmet, que, al ser requerido por el tribunal en 1590 sobre las oraciones cristianas que conocía, se apresuró a recitarlas al tiempo que se sentaba sobre sus talones. ¡Ni siquiera sabía que esa postura significaba 'per se' una actitud islámica!

Volviendo al vídeo en cuestión, de factura muy inferior a otros anteriores, sorprende que los terroristas, que publican fotografías de Felipe VI y de varios políticos del momento, no incluyan la del rey negociando la compraventa de armas con miembros de la monarquía saudí con quienes dicen que España tiene una gran amistad.