Entrevista

Éric Vuillard: "La historia no la escriben los vencedores, sino los poderosos"

La charla de Éric Vuillard en la biblioteca Carles Rahola de Girona cerró la décima edición del 'Festival del Mot'. Bajo una apariencia inofensiva, Vuillard construye bombas de relojería que dinamitan la visión que tenemos de algunos episodios de la historia

El escritor francés y premio Goncourt, Éric Vuillard.

El escritor francés y premio Goncourt, Éric Vuillard. / ALBERT BERTRAN

Albert Soler

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El prestigioso escritor y cineasta Éric Vuillard, ganador del Premio Goncourt en 2017, ha sido el encargado de poner el broche final del 'Festival del Mot' que ha tenido lugar en las ciudades de Olot y Girona.

¿La historia la suele hacer gente anónima?

A menudo nos dicen que la historia la escriben los vencedores, pero en realidad no es así. La historia no lo escriben los vencedores, sino los poderosos. Cómo explico en 'Una salida honrosa', los que escribieron la historia no son los vietnamitas, y sin embargo, fueron los ganadores. Pero fueron los poderosos, es decir, los franceses, y después, los americanos, los que ocultaron su derrota. La historia es un juego complicado, siempre hay un grupo pequeño que mantiene el poder, o lo organiza.

Y además, estos van sobre seguro.

En otro de mis libros, '14 de julio', explico un momento en que la efervescencia popular es el motor de la historia. Pero inmediatamente después, las élites se lo harán suyo. Será la noche del 4 de agosto, y abolirán los privilegios, obligados por el 14 de julio. Aquí se puede decir que la relación dialéctica es positiva. Otras veces, y esto es el que estamos presenciando hoy, es el contrario: las élites toman decisiones y el pueblo las sufre.

Lo que estamos presenciando hoy es que las élites toman decisiones y el pueblo las sufre

¿Detrás de todas las guerras suele haber intereses económicos?

Evidentemente, la colonización está motivada ante todo por ganancias económicas. La singularidad de la colonización es que es una empresa total, un hecho social total, que oculta su verdadero objetivo. Se dice que se coloniza para civilizar, incluso para emancipar a los pueblos, para convertirlos. Los conquistadores españoles, por ejemplo —sobre los cuales va mi último libro que está a punto de salir—, son ante todo personas que representan a empresarios, armadores, etc. Ellos pagaban y entonces Cortés iba hacia allí.

Hay ahora una corriente que asegura que los españoles fueron diferentes, nosotros fuimos a América a evangelizar.

No hay ninguna diferencia con otros colonizadores. Por parte de los conquistadores se trataba simplemente de convencer que la empresa sería rentable. Esto es todo. Los grandes banqueros de la época fueron inversores muy importantes de la conquista.

La colonización está motivada ante todo por ganancias económicas, su singularidad es que es una empresa total, un hecho social total, que oculta su verdadero objetivo

En España lo crucificarán por este libro.

Es un país muy católico, no? Supongo que una crucifixión tiene que ser un tipo de premio, como un título nobiliario (ríe).

¿Se puede ser rico éticamente?

Desde el momento en que se contrata alguien, para poder invertir primero, pero después para poder dotarse de un salario superior al de su empleado, y después pagar a los inversores, etc., uno está obligado a coger del que trabaja una parte de las ganancias que liberan su trabajo. A partir de este momento, de alguna manera la relación con la ética falla.

El mecenazgo tiene sus límites, es decir, mientras no se hable de ellos, se nos invita

¿Tuvo alguna llamada amenazante, después de poner nombre y apellido a los empresarios alemanes que apoyaron al nazismo en 'El orden del día'?

No, pero en la portada sale Gustav Krupp, a quien se imputaron cargos en el juicio de Núremberg. Después de salir el libro, un conocido solicitó que me recibieran en la Fundación Krupp, y se negaron. Me dijeron que era la primera vez en la historia de la Fundación que rechazaban a alguien. Se puede decir que el mecenazgo tiene sus límites, es decir, mientras no se hable de ellos, se nos invita. Cuando leemos a Virgilio u Horacio, aparecen los cumplidos de costumbre que se hacen al mecenas, no se nos habla mucho ni de sus empresas ni de su relación con las finanzas. Es mejor para Horacio hablar de las pampas, de la viña y de la amistad que del mismo mecenas. De esto se dice mecenazgo.

Cualquiera que sea la causa de la guerra, incluso si no está ligada a intereses económicos, ya llegarán. Por supuesto, los consorcios económicos siempre están detrás

Ucrania, Palestina... ¿Todavía hay intereses económicos detrás de todas las guerras?

No puede haber guerra sin un aparato militar-industrial extremadamente potente. Cualquiera que sea la causa de la guerra, incluso si no está ligada a intereses económicos, ya llegarán. Por supuesto, los consorcios económicos siempre están detrás. Ellos siempre desean obtener algún beneficio, no se hace la guerra sin armas, no se hace la guerra sin vestir a los hombres, etc. Todo esto exige la existencia de un complejo militar-industrial que no está aquí precisamente para mejorar los derechos humanos.