Julieta, brillante e intensa luz generacional en Apolo

Julieta se presenta canónica para su propósito, ese que ya acaricia: ser una diva del pop en catalán. Eso, por no decir que es una etiqueta que ya posee, que le queda a su medida, a pesar de su juventud (22 años), como comprobó anoche una sala Apolo abarrotada en la presentación de su sensacional álbum '5AM', que transita por diversos escenarios del amor vividos con intensidad y fuego juvenil. Aparición entre la 'niebla', un ventilador para mover a su larga melena rubia, mirada firme que desvela una personalidad poderosa, coreografía ambiciosa y una escenografía con pódium incluido, infalible receta si hay razones para cocinarla, como es el caso.

Julieta destaca en la manera en cómo describe situaciones, momentos, atmósferas, que trasladan a su público a sitios concretos, a experiencias pasadas o presentes. Y anoche se vivió el clímax de todo esto porque ella, joven barcelonesa, confesó que estaba en la sala en la que habían sucedido muchas de las historias que han inspirado sus canciones. '5AM' tiene una capa urbana evidente (producción a cargo de los Lowlight), tanto para canciones sobre el amor imposible, 'Diga'm el que sents', apertura anoche tras la presentación, como en su respuesta inmediata, 'Enamorada de tu', para aquella relación que cuesta olvidar.

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Salió de la noche de fiesta que dibuja en su segundo álbum para recluirse en 'Secret' o 'Si tienes frío' y desbocarse en 'Ens besem'. La celebración fue compartida con Maria Hein ('Club'), The Tyets ('Clar que t'he trobat a faltar') y Mushkaa, con quien interpretó 'No m'estima+' en un momento de locura colectiva, instantes que definen la importancia y la trascendencia de ambas, protagonistas principales de una joven escena catalana.

Julieta, otra vez como marcan los cánones, dejó para el final algunas de sus canciones más vinculadas al club, y no solo el reguetón de 'T'enxules', sino temas que se agigantan con luces de neón, como 'En mi coche', y con bolas de espejos de discoteca, como 'Oh la la', 'Cari' o 'Trenca'm el cor', con la que cerró -antes sonó un majestuoso canto a la nostálgia titulado 'Com aquell agost'- una noche en la que la barcelonesa confirmó ser una indiscutible luz generacional.