Festival de verano de Barcelona

Segunda semana del Festival Grec: de la poesía de cabosanroque al 'bondage' de Rocío Molina

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Marta Cervera

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La segunda semana del Grec ha estado dominada por el calor. Costaba despalzarse entre los espectáculos del Grec Ciutat y del Grec Montjuïc sin hacer una parada técnica para refrescarse. Por suerte, la calidad de los espectáculos y el aire acondicionado en los recintos convertidos en refugios climáticos culturales compensaba los calores sobre el asfalto y el horno de los andenes del metro.

El jueves en el Antic Teatre no se cabía en el estreno de 'Hit me if I'm pretty * o la princesa moderna', chocante propuesta de Juana Dolores. La poeta y performer preveía que sería imposible para ella aguantar las 21 funciones previstas tal y como le reclamaba la productora. Y visto como grita en algunos momentos de la función con una mezcla de rabia y discurso feminista puede que se quede sin voz y se tome la baja como había previsto.

El viernes Rocío Molina regresó a Barcelona tras su friunfo en el TNC con 'Trilogía de la guitarra' con una propuesta inquietante y extrema: 'Carnación'. El 'bondage' entre ella y Niño de Elche como metáfora de las ataduras entre madre e hija dejó imágenes impactantes en el Mercat de les Flors.

Un acierto la inclusión de una violinsita que hace mucho más que tocar su instrumento y de una soprano. El coro, en Barcelona les acompañó la Coral Càrmina, quedó algo desdibujado. Su atrevimiento recibió una sonada ovación y generó debate. "Qué angustia me daban cuando le ataba", comentaba una mujer. "No sé si lo he entendido", decía otra señora.

A diferencia del aforo completo de Molina, los dos montajes a los que acudí el sábado no llenaron. La Villarroel contó con la mitad del aforo en la función de tarde de 'Guardianes del corazón de la Tierra', una propuesta documental de La Conquesta del Pol Sud. Txana Bane, nacido en el seno de la comunidad indígena Huni Kuin que mostraba la vida en la selva amazónica de Brasil con una visión muy diferente a la del mundo capitalista. Imágenes filmadas en la selva proyectadas en una estructura con forma de contenedor daban sentido a una propuesta que llevaba a la reflexión.

Otros lenguajes

En el Lliure, Señor Serrano tampoco llenó con 'Una illa', una propuesta interesante creada con Inteligencia Artificial (IA) donde exploran un cambio radical de lenguaje en el que en lugar de objetos y cámaras utilizan actores y bailarines para montar una obra nacida de dos años de trabajo con diferentes programas de IA. Resulta algo extraña y no tiene el ritmo de sus anteriores espectáculos pero hay ideas interesantes, sobre todo en el tratamiento de imágenes creadas por ordenador.

Más allá de las salas teatrales el Festival Grec conecta con diversos museos de la ciudad. En el CCCB cabosanroque expone su trilogía sobre autores catalanes. Sus sugerentes instalaciones poéticas y sonoras dedicadas a Joan Brossa y a Jacint Verdaguer están generando cuirosidad y la de Mercè Rodoreda llegará este sábado en sustitución de la de Brossa. Laia Torrents y Roger Aixut son unos 'cracks' a la hora de crear sensaciones a través de instalaciones tan sonoras como plásticas. Hacen auténticas filigranas. 'Dimonis', montado en el piso superior y dedicada al poeta Verdague reproduce el plano del piso al que acudió el autor de 'L'Atlàntida' para asistir a exorcismos es mucho muy diferente a la de Brossa pero igualmente enigmática y sorprendente.

'Lali Symon' la tragicomedia escrita y dirigida por Sergi Belbel recogió un caluroso aplauso el domingo en el Romea, a tope de público. En ella Emma Vilarasau interpreta a una famosa cómica que entra en crisis. Más allá de descubrir sus dotes para la 'stand up comedy', juega con la realidad y la ficción compartiendo escenario con Mont Plans, brillante en su rol de tozuda madre de la protagonista que se entiende mejor con su nieta, que interpreta la sólida Júlia Bonjoch, que con su hija. El montaje hace reír, tiene alguna sorpresa y toca la fibra pero se hizo un poco largo.

'La paella del dijous' una divertida comedia de Cristina Clemente funciona como un reloj en El Maldà. Amor, vida y muerte también aparecen en esta obra que conecta con el público de principio a fin con un reparto bien compenetrado con Lluïsa Castell, Jordi Andújar y Núria Cuyàs que hicieron las delicias de en El Maldà.

La propuesta de la pequeña sala de proximidad, llena hasta la bandera, forma parte de la trilogía catalanoargentina que han creado entre Clemente y Nelson Valente que está triunfando en la Flyhard con 'Silvia'. El 'chimpún' final llegará la última semana del Grec con 'Rovira Vs. Rodríguez' en el Versus Glòries. Ya les contaremos.