Calentamiento global

El Ártico podría empezar a quedar “libre de hielo” en 6 años, según los científicos

Nuevos estudios adelantan el momento en que la región quedaría desprovista de hielo durante el verano

El Ártico empezará a tener días sin hielo más pronto de lo previsto

El Ártico empezará a tener días sin hielo más pronto de lo previsto / Pixabay

Joan Lluís Ferrer

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El Ártico podría experimentar días de verano prácticamente sin ningún hielo marino en menos de una década, según el pronóstico que han hecho científicos de la Universidad de Colorado Boulder (EEUU) tras analizar la acelerada evolución del calentamiento en esta parte del planeta.

Los hallazgos, publicados en la revista Nature Reviews Earth & Environment, permiten aventurar que el primer día sin hielo en el Ártico podría ocurrir más de 10 años antes que las previsiones anteriores. La tendencia al derretimiento, según todos los estudios, se mantiene constante en todos los escenarios de emisiones futuros, tanto en los más graves como en los más moderados.

A mediados de siglo, es probable que el Ártico ya experimente un mes completo sin hielo flotante en septiembre, que es cuando la cobertura de hielo marino de la región suele ser la mínima. Sin embargo, para finales de siglo, la situación empeoraría y la temporada sin hielo podría durar varios meses al año, dependiendo de los futuros escenarios de emisiones.

Por ejemplo, en un escenario de altas emisiones (en las que todo siga igual que ahora), la región más septentrional del planeta podría quedar constantemente libre de hielo incluso en algunos meses de invierno.

El Ártico está en situación de emergencia

El Ártico está en situación de emergencia / Agencias

Ahora, bien, ¿qué se entiende por no haber hielo en el Ártico? Para los científicos, un Ártico sin hielo no significa que no vaya a haber nada de hielo en el agua.

Los investigadores dicen que el Ártico está libre de hielo cuando el océano de esa región tiene menos de 1 millón de kilómetros cuadrados de hielo. Ese umbral representa menos del 20% de lo que era la capa de hielo mínima estacional de la región en la década de 1980. Y es que en los últimos años, el Océano Ártico tenía alrededor de 3,3 millones de kilómetros cuadrados de superficie de hielo marino en su mínimo en septiembre.

Cómo se realizó el estudio

Alexandra Jahn, profesora asociada de Ciencias Atmosféricas y Oceánicas y miembro del Instituto de Investigación Ártica y Alpina de CU Boulder, se propuso analizar los estudios previos publicados sobre la evolución prevista del hielo marino. Ella y sus colaboradores también analizaron datos de la cobertura del hielo marino a partir de modelos climáticos computacionales para evaluar cómo el Ártico podría cambiar diariamente en el futuro.

Descubrieron que el primer día en que la cobertura de hielo marino se sitúe por debajo del umbral de 1 kilómetro cuadrado ocurriría en promedio cuatro años antes que los promedios mensuales, pero también podría ocurrir hasta 18 años antes.

Paisaje ártico

Paisaje ártico / Pxhere

"Cuando se trata de comunicar lo que los científicos esperan que suceda en el Ártico, es importante predecir cuándo podremos observar las primeras condiciones sin hielo en el Ártico", dijo Jahn.

El equipo pronostica que el Océano Ártico podría quedar libre de hielo por primera vez en un día de finales de agosto o principios de septiembre entre las décadas de 2020 y 2030 en todos los escenarios de emisiones.

Jahn dijo que las emisiones de gases de efecto invernadero son los principales responsables de la pérdida de hielo marino. Al disminuir el grosor de la capa de nieve y hielo, aumenta la cantidad de calor de la luz solar que absorbe el océano, lo que intensifica el derretimiento del hielo y el calentamiento en el Ártico.

Múltiples impactos

La disminución del hielo marino tiene impactos significativos en los animales de esta parte del planeta que dependen del hielo marino para sobrevivir, como es el caso de las focas y los osos polares. Además, a medida que el océano se calienta, a los investigadores les preocupa que peces no nativos puedan trasladarse al Océano Ártico, convirtiéndose en especies invasoras que podrían dañar también la biodiversidad local.

La pérdida de hielo marino también representa un riesgo para las comunidades humanas que viven cerca de la región costera. Y es que el hielo marino juega un papel importante a la hora de amortiguar los impactos de las olas del océano en la costa, dijo Jahn. A medida que el hielo marino retrocede, las olas del océano se harían más grandes, provocando una mayor erosión costera y poniendo en peligro ciudades e infraestructuras.

El oso polar, gravemente amenazado

El oso polar, gravemente amenazado / Pixabay

Si bien un Ártico sin hielo es ya inevitable, Alexandra Jahn dijo que los futuros niveles de emisiones condicionarán la velocidad a la que se produzca este cambio. En un escenario de emisiones intermedio, que es hacia el que se dirige la sociedad actual, el Ártico podría quedar libre de hielo sólo a finales del verano y principios del otoño, de agosto a octubre. Pero en el escenario de mayores emisiones, el Ártico podría estar libre de hielo durante hasta nueve meses a finales de este siglo.

"Esto transformaría la región en un entorno completamente diferente, desde un Ártico blanco de verano a un Ártico azul. Por lo tanto, incluso si la desaparición de hielo es inevitable, debemos mantener nuestras emisiones lo más bajas posible para evitar condiciones prolongadas sin hielo", añadió la científica.

Ahora bien, también hay una buena noticia: el hielo marino del Ártico resulta ser resistente y puede regresar rápidamente si la atmósfera se enfría en el futuro.

"A diferencia de la capa de hielo de Groenlandia, que tardó miles de años en construirse, incluso si derritiéramos todo el hielo marino del Ártico, si en el futuro podemos descubrir cómo recuperar el CO2 de la atmósfera para revertir el calentamiento, el hielo marino regresará dentro de una década", dijo Jahn.

Estudio de referencia: DOI: 10.1038/s43017-023-00515-9

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