La policía registra la sede del Comité Organizador de los JJOO de París 2024

Otra mancha más en la imagen de los Juegos Olímpicos de París 2024. La policía francesa ha llevado a cabo este martes por la mañana varios registros en sedes e instituciones vinculadas a la cita olímpica, que se celebrará el verano del año que viene en la capital francesa. Estas inspecciones incluyen la sede del Comité de Organización (COJO) y la Sociedad de Entrega de Obras Olímpicas (SOLIDEO), según informó la televisión pública gala y confirmó la Fiscalía Nacional Financiera (PNF).

Los registros están relacionados con dos investigaciones judiciales preliminares, abiertas en 2017 y 2022. La fiscalía investiga presuntos delitos de conflictos de intereses, malversación de fondos y favoritismo en la concesión de contratos relacionados con la organización de la competición.

Una de las investigaciones, según fuentes cercanas al caso, se debe a un posible conflicto de intereses con una empresa de eventos fundada por Etienne Thobois, director general del Comité de organización, y por Edouard Donnelly, director ejecutivo del mismo organismo. El COJO "colabora plenamente (...) para facilitar las investigaciones", indicó este órgano a la Agencia France-Presse.

Presuntas irregularidades

La Agencia Francesa de Anticorrupción (AFA) ya había advertido en abril de 2021 sobre "el riesgo de faltas a la probidad" y "conflictos de intereses", tanto en las tareas del Comité de Organización como en el organismo encargado de la concesión de obras. En esos dos informes de la AFA, cuya existencia fue desvelada el mes pasado por el semanario de investigación 'Le Canard Enchaîné', se alertaba que el proceso de contratación había sido "impreciso e incompleto". También se señalaba que hubo "situaciones de potenciales conflictos de intereses no controlados".

Las inspecciones de este martes tienen lugar menos de dos semanas después de que el Ayuntamiento de París y la Corte de Casación (equivalente galo del Tribunal Supremo) organizaran el 9 de junio un coloquio con el título de "La probidad a prueba en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2024". El director general de la SOLIDEO, Nicolas Ferrand, defendió en ese acto su compromiso ético, a pesar de las advertencias que ya se conocían entonces por parte de la Agencia Anticorrupción.

Una cita olímpica rodeada por polémicas

Las investigaciones por corrupción resultan habituales en las citas olímpicas —y en las grandes competiciones deportivas en general—. Los Juegos de Tokio de 2021 ya se habían visto salpicados por un affaire sobre los presuntos sobornos que pagó una gran agencia de publicidad japonesa para obtener la concesión de contratos. El exresponsable del Comité Olímpico nipón, Tsunekazu Takeda, fue imputado en 2019 por la Justicia francesa por haber supuestamente sobornado en aras de lograr la organización de los Juegos.

Conscientes de que la llama olímpica se ha debilitado, los organizadores de los Juegos de París de 2024 prometieron organizar una cita ética y ecológicamente sostenible. Pero en los últimos meses se han sucedido las polémicas. La noticia de los registros ha coincidido con la denuncia por parte de diez trabajadores, oriundos de Mali y República Democrática del Congo, que participaron en las obras de los Juegos y acusan a las grandes constructoras que los empleaban (como Vinci o Eiffage) de no haberlos ofrecido condiciones de trabajo legales (con una nómina, vacaciones o un horario dentro de la legalidad).

La presidenta del Comité Olímpico Francés, Brigitte Henriques, dimitió el mes pasado tras una lucha de poder con su predecesor. Y a eso se le suman las múltiples polémicas por la mascota, los elevados precios de las entradas o el uso de voluntarios como mano de obra. El objetivo noble de organizar una "fiesta popular" que encandile a la mayor parte de la exigente sociedad francesa no está siendo un camino de rosas. Más bien lo contrario.