LÍDER MUNDIAL EN VACUNACIÓN

Israel incentiva la vacunación del covid con un 'pasaporte verde'

Netanyahu premia a las personas inmunizadas con el permiso para acudir a centros comerciales, gimnasios y hoteles

Los israelís vacunados pueden acceder a los centros comerciales del país.

Los israelís vacunados pueden acceder a los centros comerciales del país. / AFP

Andrea López-Tomàs

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“Vayan a vacunarse”. Tras levantar un par de pesas, el primer ministro israelí Binyamin Netanyahu anima a su población a inmunizarse desde un gimnasio de Tel Aviv. Israel ha abierto este fin de semana hoteles, centros comerciales y gimnasios para el 32% de su ciudadanía que está ya completamente inmunizada. Las autoridades usan diversos mecanismos para premiar a quienes se inoculen, a la vez que castigan a aquellos que se niegan a hacerlo. A un mes de las cuartas elecciones en dos años, Netanyahu busca la inmunización generalizada para lograr una completa vuelta a la normalidad antes de los comicios. 

Un tercio de los 9,3 millones de israelís ya pueden disfrutar de una jornada de compras o de una escapada vacacional. La campaña de vacunación de Israel, líder en el mundo, ha permitido a parte de su ciudadanía empezar a gozar de los beneficios que les reporta integrar el porcentaje de población vacunada. Centros comerciales, gimnasios, hoteles y algunas escuelas han abierto sus puertas para este 32% de israelís que han recibido las dos dosis de la vacuna. Solo los lugares de culto y las tiendas en la calle permanecen abiertas para el público general. 

De esta forma, Netanyahu premia a quienes se inmunizan. “Les pido a todos los que no han sido vacunados: háganlo”, ha declarado este sábado desde un gimnasio antes de su apertura. Con cafés y pizzas gratis en los centros de vacunación, las autoridades israelís buscan engañar a los recelosos por el estómago. “Tendrás el pasaporte verde y también podrás beneficiarte de él”, ha recordado Netanyahu. Este documento busca atraer a las personas más escépticas con la vacuna a través de una serie de beneficios. El pasaporte verde se obtiene ocho días después de recibir ambas dosis y tiene validez durante seis meses

Castigos al escepticismo

“Vacunarse es un deber moral, es parte de nuestra responsabilidad mutua”, ha recordado el ministro de Salud, Yuli Edelstein. Aunque ha insistido que la vacunación en Israel no sería obligatoria, ha condenado a los no inoculados: “quién no se vacune se quedará atrás”. Algunos lugares de trabajo pronto empezarán a requerir que su personal esté vacunado o bien se someta a una prueba de coronavirus cada 48 horas. También aquellas 740.000 personas recuperadas del virus pueden recibir el pasaporte verde al no ser elegibles para la vacuna. 

La persecución de quienes se nieguen a vacunarse ha llegado al debate parlamentario. El gabinete de Netanyahu está promoviendo un proyecto de ley que permita al ministerio identificar a las personas no vacunadas ante las autoridades locales. Incluso, se ha planteado la posibilidad de aplicar sanciones legales. “Revelar los nombres de israelís que aún no se han vacunado allana el camino para una grave violación de la privacidad”, ha denunciado Mordejai Kremnitzer en ‘Haaretz’. 

Grecia y Chipre, corredores verdes

A su vez, buscan hacer obligatoria la inoculación para ciertas profesiones como la educación, el transporte de personas, la medicina o la enfermería. También la semana pasada Israel anunció corredores verdes con Chipre y Grecia que permitirán viajar a la ciudadanía de ambos países sin necesidad de PCR ni cuarentenas obligatorias. En un intento de reavivar el sector tan castigado del turismo, Netanyahu mantiene conversaciones para hacer lo mismo con Rumania, Georgia o las islas Seychelles. 

La amplia experiencia de Israel le ha permitido recibir unos primeros resultados sobre la efectividad de la vacuna Pfizer. Con el 47% de la población receptora de la primera dosis, la efectividad roza el 94% por la disminución de los casos sintomáticos de coronavirus en las últimas semanas. Mientras, las cifras de contagios se mantienen alrededor de los 4.000 diarios con una tendencia a la baja. Se prevé que en las próximas semanas todas las escuelas y restaurantes vuelvan a abrir, justo a tiempo para la cuarta cita electoral de Netanyahu en dos años. Bibi quiere llegar al 23 de marzo con un Israel contento de haber vuelto a la normalidad.