El congresista tiroteado se encuentra en estado grave

El congresista republicano Steven Scalise, víctima de un tiroteo el miércoles en Virginia, se encuentra en un estado más grave de lo que inicialmente se pensaba, según ha señalado el presidente de EEUU, Donald Trump, y ha confirmado el hospital en el que se encuentra ingresado.

Su situación "es mucho más difícil de lo que la gente esperaba en el momento", ha afirmado Trump, en unas breves declaraciones en la Casa Blanca, y después de visitar el miércoles por la noche al congresista en el hospital.

Scalise, el tercer republicano de más alto rango en la Cámara de Representantes de EEUU, resultó herido junto a otras cuatro personas cuando un hombre opuesto a Trump la emprendió a tiros en un entrenamiento de béisbol en el que participaban una veintena de legisladores.

El congresista, de 51 años y representante por Luisiana, recibió un disparo en la cadera y se encuentra en estado "crítico", según los médicos. El último comunicado del hospital MedStar de Washington señalaba que sufrió "un único disparo de rifle en la cadera izquierda".

LA BALA

"La bala viajó por su pelvis, fracturando huesos, dañando órganos internos y causando una fuerte hemorragia", ha informado el centro hospitalario, que ha añadido que Scalise requerirá más intervenciones quirúrgicas.

El incidente se produjo a primera hora del miércoles cuando James Hodgkinson, de 66 años y natural del estado de Illinois, disparó contra los congresistas, familiares y asesores que preparaban un partido de béisbol benéfico contra los demócratas en Alexandria (Virginia). Antes de emprenderla a tiros, Hodgkinson se cercioró de la filiación política de los asistentes.  

El agresor falleció después de resultar herido en el subsiguiente intercambio de disparos con la policía que trataba de reducirlo. Hodgkinson había expresado en numerosas ocasiones en las redes sociales su indignación con Trump y los republicanos.