RESCATE EN CHILE

Edison ya puede correr al aire libre

El duodécimo minero rescatado trotaba al menos 10 kilómetros diarios bajo tierra para combatir la ansiedad

EFE

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Edison Peña, que puede ser comparado con el personaje cinematográfico Forrest Gump por su afán de correr al menos 10 kilómetros diarios, ha sido el duodécimo minero rescatado de la mina San José, en el norte de Chile.

De 34 años, este trabajador se las arregló para cumplir su práctica cada uno de los 70 días que permaneció, junto a 32 compañeros, atrapado a 700 metros de profundidad en el yacimiento, pese a las difíciles condiciones de aire y luz existentes en el lugar.

Peña, a quien no arredran sus problemas de oído, hipertensión y diabetes, pidió zapatillas y un pantalón deportivo corto para correr mejor en el fondo de la mina cuando los equipos de rescate contactaron con los atrapados, el pasado 22 de agosto. Nacido y criado en el municipio santiaguino de Renca, Edison Peña se trasladó al norte de Chile para estar cerca de su novia, Angélica Álvarez, que fue quien le consiguió trabajo en la mina San José.

"Estamos vivos"

"Tengo ansiedad y me dan ganas de correr", escribió a su novia durante el forzoso y prolongado encierro que padeció. "Me imagino que hacemos viajes a playas, campo, todo, todo. Quiero estar libre, quiero ver el sol", añadió Peña, cuyo padre, Fernando, le describe como "muy fuerte y alegre".

Angélica y su padre le esperaban, nerviosos, cuando Edison salió de la cápsulaFénix 2, a las 10.11 hora local (las 15.11 en horario peninsular español), 40 minutos después que lo hiciera Jorge Galleguillos, que le precedió en el orden de evacuación. "¡Grande, Edison, grande, grande!", le ha dicho el presidente de Chile, Sebastián Piñera, que estaba junto a su homólogo de Bolivia, Evo Morales, en el punto de salida de la cápsula.

Ambos gobernantes han abrazado a Edison después de que lo hiciera con Angélica, siguieron en los saludos las demás autoridades presentes, como los ministros de Minería, Laurence Golborne, y de Salud, Jaime Mañalich. Cuando era trasladado en camilla al primer chequeo médico, Edison Peña no ha cesado de repetir: "Estamos vivos".