Pesquisas judiciales en marcha

Investigados por presunto tráfico de influencias el exconcejal de Seguridad y el exjefe policial de L'Hospitalet

Un juez indaga sobre presuntas irregularidades en torno a unas oposiciones a superintendente de la Guardia Urbana

CONTEXTO | Registro policial en la Guardia Urbana de L'Hospitalet por las oposiciones de superintendente

PRECEDENTE | Ordenan suspender la convocatoria de superintendente de la Guardia Urbana de L'Hospitalet hasta el juicio

Guardia Urbana de L'Hospitalet de Llobregat.

Guardia Urbana de L'Hospitalet de Llobregat. / Ayuntamiento de L'Hospitalet de Llobregat

Manuel Arenas

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El Juzgado de Instrucción número 3 de L'Hospitalet de Llobregat investiga por un presunto delito de tráfico de influencias a Pepe Castro y Ramon Dosaigües, exteniente de Alcaldía de Seguridad (y actual asesor del PSC) y exjefe de la Guardia Urbana de L'Hospitalet, en el contexto de las pesquisas judiciales en torno a presuntas irregularidades vinculadas a las oposiciones a superintendente de la policía local, según confirman a EL PERIÓDICO fuentes conocedoras del caso y corroboran fuentes municipales.

El juez, con el apoyo de la UDEF (Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal) de la Policía Nacional, investiga si Castro y Dosaigües incurrieron en irregularidades para amañar unas oposiciones a superintendente de L'Hospitalet, la más alta figura policial de la Guardia Urbana, y así convertir al jefe interino en el máximo responsable de la policía de la ciudad.

La novedad judicial tiene lugar después de las actuaciones policiales del pasado 29 de junio, cuando una decena de agentes de la UDEF registró las dependencias de la Prefectura de la Guardia Urbana del Ayuntamiento de L'Hospitalet.

Tal y como apuntaron a este diario fuentes tanto del consistorio como de la Policía Nacional, se trató de una actuación en busca de información y correos sobre el frustrado proceso de convocatoria de la figura de superintendente de la Guardia Urbana local, cuyas oposiciones suspendió el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 10 de Barcelona hasta la fecha prevista para el juicio, julio del 2024.

La suspensión judicial llegó después de que un agente de la Guardia Urbana que se había presentado a la convocatoria de superintendente denunciara un presunto delito de prevaricación continuada y falta de imparcialidad contra el ahora exconcejal de Seguridad, Movilidad y Convivencia, Pepe Castro, y el entonces intendente jefe de la Guardia Urbana, Ramon Dosaigües, quien fue el otro postulante a superintendente.

Fuentes municipales del Ayuntamiento de L'Hospitalet reiteraron a este diario que "creemos que fue correcto el trabajo que se hizo en relación al proceso selectivo" de la figura de superintendente.

Protestas contra Castro y Dosaigües

Los problemas en la Guardia Urbana de L'Hospitalet, cuya plantilla estuvo enfrentada desde hace meses con la jefatura y con el gobierno municipal, se incrementaron a finales de octubre, cuando un cabo de la Guardia Urbana de L'Hospitalet señaló estas supuestas irregularidades durante las oposiciones para el puesto de superintendente -un cargo que actualmente sólo existe en Catalunya en la Guardia Urbana de Badalona-.

A estas oposiciones se presentaron únicamente el cabo candidato y el entonces intendente de la Guardia Urbana de L'Hospitalet, Ramon Dosaigües. Así, el cabo quedó excluido del proceso tras ser declarado no apto en la prueba psicotécnica, sin, según el mismo, recibir ninguna explicación ni valoración técnica.

El cabo llevó el caso ante los tribunales para pedir la anulación de las oposiciones; en el recurso, alertó de que el Ayuntamiento había dado apoyo explícito "en favor del otro candidato para ocupar la plaza de superintendente". El proceso selectivo impugnado finalizó sin que ninguno de los candidatos fuera considerado apto, y se abrió otra convocatoria.

Tras ello, durante los últimos meses, los agentes de la Guardia Urbana de L'Hospitalet, principalmente bajo la coordinación del SPL-CME, han protagonizado varias protestas contra Castro y Dosaigües e incluso estuvieron a punto de paralizar un Pleno municipal del Ayuntamiento de L'Hospitalet. Unas protestas en las que las críticas contra la convocatoria siempre estuvieron presentes, así como la gestión realizada por Dosaigües y los cambios en el organigrama de trabajo.

Además, según señalan fuentes cercanas al caso a este diario, varios agentes de la Guardia Urbana de L'Hospitalet han declarado sobre el caso de la convocatoria a superintendete después de ser citados por la UDEF.

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