Registro policial en la Guardia Urbana de L'Hospitalet por las oposiciones de superintendente

Una decena de agentes de la UDEF (Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal) de la Policía Nacional ha registrado durante este 29 de junio las dependencias de la Prefectura de la Guardia Urbana del Ayuntamiento de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelonès). La UDEF ha entrado en las oficinas de la Guardia Urbana antes de las 11 de este jueves y, según han apuntado fuentes municipales, han marchado del lugar poco después de las 14.30 h.

Tal y como apuntan a este diario fuentes tanto del consistorio como de la Policía Nacional, se trata de una actuación en busca de información y correos sobre el frustrado proceso de convocatoria de la figura de superintendente de la Guardia Urbana local, cuyas oposiciones suspendió el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 10 de Barcelona hasta la fecha prevista para el juicio, en julio del 2024.

La suspensión judicial llegó después de que un agente de la Guardia Urbana, que se había presentado a la convocatoria de superintendente, denunciara un presunto delito de prevaricación continuada y falta de imparcialidad contra el concejal -ahora exconcejal- de Seguridad, Movilidad y Convivencia, Pepe Castro, y el entonces intendente jefe de la Guardia Urbana, Ramon Dosaigües, quien fue el otro postulante a superintendente.

El candidato denunciante cargó asimismo contra la supuesta falta de imparcialidad y presuntas irregularidades en el proceso. A su vez, el sindicato SPL-CME, el mayoritario en la Guardia Urbana de L'Hospitalet, también pidió su anulación "por falta de justificación de la plaza". Fuentes municipales del Ayuntamiento de L'Hospitalet reiteran a este diario que "creemos que fue correcto el trabajo que se hizo en relación al proceso selectivo" de la figura de superintendente.

Anterior jefe de la Guardia Urbana

Los problemas en la Guardia Urbana de L'Hospitalet, cuya plantilla ha estado enfrentada desde hace meses con la jefatura y con el gobierno municipal, se incrementaron a finales de octubre, cuando un cabo de la Guardia Urbana de L'Hospitalet señaló estas supuestas irregularidades durante las oposiciones para el puesto de superintendente -un cargo que actualmente sólo existe en Catalunya en la Guardia Urbana de Badalona-.

A estas oposiciones se presentaron únicamente el cabo candidato y el entonces intendente de la Guardia Urbana de L'Hospitalet, Ramon Dosaigües. Así, el cabo quedó excluido del proceso tras ser declarado no apto en la prueba psicotécnica, sin, según el mismo, recibir ninguna explicación ni valoración técnica.

El cabo llevó el caso ante los tribunales para pedir la anulación de las oposiciones; en el recurso, alertó de que el Ayuntamiento había dado apoyo explícito "en favor del otro candidato para ocupar la plaza de superintendente". El proceso selectivo impugnado finalizó sin que ninguno de los candidatos fuera considerado apto, y se abrió otra convocatoria.

Tras ello, durante los últimos meses, los agentes de la Guardia Urbana de L'Hospitalet, principalmente bajo la coordinación del SPL-CME, han protagonizado varia protestas contra Castro y Dosaigües e incluso estuvieron a punto de paralizar un Pleno municipal del Ayuntamiento de L'Hospitalet. Unas protestas en las que las críticas contra la convocatoria siempre estuvieron presentes, así como la gestión realizada por Dosaigües y los cambios en el organigrama de trabajo.

Además, según señalan fuentes cercanas al caso a este diario, varios agentes de la Guardia Urbana de L'Hospitalet han declarado sobre el caso de la convocatoria a superintendete después de ser citados por la UDEF.

Vuelta de Dosaigües a El Prat

Así, tras distintos recursos, denuncias y nuevos intentos de sacar la plaza adelante, una juez ordenó en abril suspender las oposiciones a superintendente de la Guardia Urbana de L'Hospitalet hasta la fecha de juicio, en julio de 2024.

De este modo, la suspensión de la convocatoria llevó a Dosaigües a volver a la policía local del Prat al terminar la comisión de servicio por la que ejercía de intendente en L'Hospitalet desde hacía dos años y no llegar a tiempo de optar a una nueva plaza de intendente o superintendente.

Con todo, tras conocer que Dosaigües volvía a el Prat y que Pepe Castro, el entonces concejal de Seguridad de L'Hospitalet de Llobregat, no estaba incluido en la lista del PSC local para las municipales del 2023, desde el SPL-CME votó a favor de suspender las reivindicaciones a partir del 1 de mayo "a la espera de que el Ayuntamiento envíe un interlocutor válido".