"El repunte de la morosidad, un lastre para la recuperación de la economía"

En un contexto de notorio incremento de las insolvencias mercantiles, la morosidad de las empresas y del sector público constituye una seria amenaza para la sostenibilidad y viabilidad de pimes y autónomos, que pueden verse abocados al cierre.

Resulta inadmisible que las administraciones públicas no abonen sus facturas por los servicios prestados dentro del plazo legal y sistemáticamente las demoren. El sector público debería dar ejemplo de comportamiento en el puntual atendimiento de pago de las operaciones mercantiles. Se trata de un problema endémico en España que se ha venido perpetuando e incluso agravando.

No es de recibo parapetarse en la excusa de la pandemia o acudir al 'confirming', lo que repercute en costes al cliente, que deberá asumir la comisión bancaria pertinente si quiere cobrar antes. Ello afecta también a los pagos de los acreedores a sus proveedores, que, ante el impago, pueden dejar de abastecer los materiales y productos, generando un efecto dominó.

El repunte de la morosidad es un lastre para la recuperación de la economía. Deben sancionarse tales prácticas y adoptarse medidas que agilicen el pago, especialmente en el ámbito de la administración pública. La reactivación económica no debe ralentizarse ni colapsarse por la morosidad.