INS Pere Ribot de Vilassar de Mar: Barracones, ¿dónde los ponemos?

Este curso escolar han aumentado una línea en el INS Pere Ribot de Vilassar de Mar: preparado para tres líneas se ha pasado a cuatro. Para ello, se han llenado las clases en origen para unos 20 niños con unos 30 y ocupado espacios polivalentes como el aula de dibujo. Como ya no caben más dentro, el Departament d'Ensenyament ha programado para el curso que viene la instalación de barracones.

El asunto es: ¿dónde los pongo? El espacio donde en origen se proyectó el crecimiento natural y previsible del INS se ocupó con una construcción con otro objetivo y se llevó casi todo el patio, así que solo queda espacio en un lateral destinado para el huerto. Colocar los barracones ahí eliminaría un proyecto educativo de la escuela, taparía las ventanas de las aulas y masificaría más si cabe los pocos espacios comunes que en su día fueron minimizados por modificaciones y recortes del proyecto inicial.

¿Solo hay esta posible y única solución? Seguro que no. Sentémonos y hablemos con los datos precisos del volumen de la demanda y siempre en mente que los barracones no son un mal menor, sino un mal mayor que repercute en la calidad educativa.