El centro derecha nacionalista catalán se ha quedado huérfano

El centro derecha nacionalista se ha quedado huérfano, sin  representantes políticos. No ha bastado con cambiarse el nombre. Los  penosos resultados obtenidos por Convergència muestran claramente que  sus partidarios quieren un partido nuevo limpio de corrupción. Nuestro  país necesita urgentemente llenar el vacío generado por la práctica  desaparición de Convergència y que nazca lo antes posible un nuevo  partido que deje muy clara su posición ante la corrupción y ante los  casos ocurridos en nuestro país (fundamentalmente el caso Pujol),  representante de autónomos, pequeña y mediana empresa y profesionales  y defensor de los valores de esfuerzo, honradez y trabajo que siempre  nos han caracterizado.

Hacen falta unos representantes limpios y capaces de defender eso  valores que bajo Convergència han quedado corrompidos. No basta con  cambiarse de nombre, no basta con maquillarse, nadie se ha creído ese  engaño. Los sectores que defienden el esfuerzo y el trabajo quieren  representantes nuevos y honrados.

Hay que iniciar el proceso de creación de un nuevo partido de centro  derecha catalanista. Sin este partido nuevo no hay 'procés'. Los  ciudadanos han dicho claramente que quieren una Catalunya más soberana  o independiente, pero nuestros representantes no nos han acompañado.