"Ángel Echenique, periodismo y animación: El humor y la novedad son de los mejores remedios"

Siempre es sensato recordar a aquellos que en su momento aportaron algo que, de alguna manera, les hizo en el ámbito en que desarrollaban su trabajo, por elemental que fueran, ocupar un lugar en la historia, aunque sea breve. Hace 70 años, en 1949, el periodista aragonés Ángel de Echenique (1916-1995) producía y ponía en escena el largometraje de dibujos animados Las aventuras de Esparadrapo, el cual, en el momento de penuria -tanto material como cultural- que padecía España, iba a poner un interés y alguna sonrisa en los labios de los que tuvieron ocasión de visionarlo. Es bueno estar mucho tiempo sin llorar, pero muy malo estar mucho tiempo sin reír.

Pionero del periodismo radiofónico -fue el primer informador que utilizó unidades móviles y llevó el teléfono a las emisoras de radio, así como logró la aprobación para que los reporteros pudieran exhibir su micrófono-, transmitió al mundo de habla hispana la coronación de Isabel II y entrevistó personalmente a gentes de la escena, entre ellos a la misma Rita Hayworth en la cima de su carrera o aquel científico que con su descubrimiento salvó tantas vidas, Alexander Fleming.

En los momentos oscuros y angustiosos, el humor y la novedad son de los mejores remedios, y Ángel de Echenique decidió llevarlos a la práctica. Perfeccionó el periodismo logrando más amplitud y expansión. También, consciente del poder de la imagen, redó un humilde pero muy interesante, explicito y divertido largometraje de animación, marcando un camino que muchos iban a seguir hasta nuestros días.