Sánchez promete "fortalecer" la Ley de Cadena Alimentaria tras las protestas de los agricultores

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles que el Gobierno va a "fortalecer" la Ley de Cadena Alimentaria”, tras la movilización de agricultores y ganaderos surgida en los últimos días, que se ha adelantado a la convocatoria oficial. En la primera sesión de control al Gobierno del año, Sánchez ha afirmado que "el Gobierno está con el campo" y ha anunciado mejoras a nivel nacional para reducir las lagunas de una norma que trata de evitar la venta a pérdidas.

"Nosotros estamos facilitando la adaptación a la normativa de la Unión Europea, estamos simplificando la PAC, estamos implementando cláusulas espejo y vamos a fortalecer la Ley de la Cadena Alimentaria", ha respondido Sánchez a la diputada de ERC, Teresa Jordá, que minutos antes había pedido al Gobierno "legislar pensando en el pequeño productor y no en los grandes terratenientes herederos de la Duquesa de Alba”.

El anuncio de Sánchez no implica que habrá una nueva reforma de esta norma, sino que se dirige a la dotación de más personal para la Agencia de Información de Información y Control Alimentarios (AICA) para intensificar las inspecciones, según explican fuentes del Ministerio de Agricultura. No obstante, el departamento que dirige Luis Planas advierte que son las comunidades autónomas y las organizaciones agrarias quienes deben denunciar los incumplimientos de la ley para que la AICA inicie su labor.

El Gobierno reformó la Ley de la Cadena Alimentaria antes de la pandemia, a finales de febrero de 2020, con el objetivo de poner coto a la venta a pérdidas después de una oleada de protestas en las carreteras españolas, muy similar a las tractoradas que se han comenzado a celebrar en los últimos días. Cuatro años después, los agricultores vuelven a pedir la modificación y ampliación de esta Ley para prohibir las prácticas desleales para que los precios de los precios que cobran por sus productos cubran los costes de producción, así como un mayor control por parte de la Agencia de Información y Control Alimentario.

La reforma de la Ley de la Cadena Alimentaria es una de las principales demandas del sector, a las que se une la paralización de la negociación de acuerdos de libre comercio con terceros países o un mayor control de las importaciones. "Tenemos absoluta disposición e interlocución con el sector del campo y absoluta empatía. No solo hablamos del cambio climático sino de los efectos perniciosos que ha tenido sobre los fertilizantes u otros insumos la guerra de Ucrania y la inestabilidad geopolítica que estamos atravesando. Y también tenemos una labor de persuasion ante las autoridades comunitarias y en Bruselas ante las demandas justas", ha afirmado el presidente del Gobierno.

Hasta 4.000 millones en dos años

Sánchez primero y el ministro de Agricultura, Luis Planas, después han recordado en sus intervenciones que desde 2022 el Gobierno había desplegado de 4.000 millones de euros en ayudas al sector, de los cuales 1.380 millones fueron ayudas directas y 2.800 millones de euros se dirigieron para la modernización del regadío. A esto se suma los 6.800 millones de Bruselas a través de la PAC, de los cuales 4.000 millones son ayudas directas a explotaciones agrarias y ganaderas. "Somos el Gobierno que mejor comprende y más ha apoyado a los agricultores y ganaderos de España en este siglo", ha afirmado Planas, desde la tribuna del Congerso.

"La situación del sector primario no debería ser un motivo para azuzar el conflicto como lo es para el PP y Vox. Tenemos que trabajar junto la Comisión Europea, el Gobierno de España y las comunidades autónomas. Las comunidades del PP han puesto cero euros", ha añadido. El ministro ha concretado, en respuesta a Junts, que en el caso de Catalunya se ha pagado 82 millones de euros de ayudas a 38.300 agricultores y ganaderos, 46 millones de euros han sido la subvención suplementaria a los seguros agrarios y 140 millones a ocho obras de modernización del regadío. "Este es un Gobierno que escucha, dialoga y se compromete", ha añadido Planas en dirección a las críticas de PP y Vox, a quienes ha pedido que "no manipulen las legítimas preocupaciones de los agricultores y ganaderos".

Crítica a las políticas ambientales

Los líderes de PP y Vox, Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal han dirigido sus críticas a las políticas ambientales del Gobierno que, a su juicio, asfixian al campo. Feijóo había aprovechado su primera intervención para recordar que su Ejecutivo había acusado al campo de “desperdiciar agua”, ha descartado “no bajar el IVA a la carne, el pescado y las conservas”, “dar al lobo más protección que a las cabezas de ganado” y pedir que “no comamos ternera”. Mientras que Abascal ha criticado que el Gobierno español no quiere un país de agricultores y ganaderos “sino de borregos" y le ha acusado de "traición en Bruselas" en favor de "dogmatismo ambiental". "Lo único que hacen con el CO2 es deslocalizarlo igual que deslocalizan la producción industrial, energética y la agricultura en beneficio de terceros", ha dicho Abascal.

"Atención. Ustedes estarán contra la Agenda 2030, pero el cambio climático está aquí. Está aquí más rápido incluso de lo que pensábamos hace unos años. Estamos muy cerca ya del 1,5º, casi a 1,25º. Y lo vivimos en las temperaturas o en la ausencia de agua. Y frente a todo eso no vale ideología, como usted bien dice, valen hechos. Por ejemplo, la modernización del regadío, la utilización de aguas no convencionales a través de aguas recicladas o desaladas aprovechando las renovables, o las nuevas técnicas de edición genética que permitirán resistir mejor a esa situación de cambio climática", ha respondido Planas. No obstante, el ministro ha confirmado que el Gobierno "va a mantener el gasóleo agrícola bonificado en España" porque a día de hoy no hay manera de sustituir los combustibles fósiles para uso agrícola y ganadero.