Petición al Gobierno

La Cambra pide que las inversiones en el corredor atlántico no afecten a las del mediterráneo

La entidad reclama al ejecutivo español que impulse nuevas actuaciones para resolver a tiempo los futuros cuellos de botella ferroviario

Nueva fase de obras en el ámbito de Castellbisbal, en Barcelona. Foto de Adif.

Nueva fase de obras en el ámbito de Castellbisbal, en Barcelona. Foto de Adif. / ADIF

Cristina Buesa

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La Cambra de Comerç de Barcelona ha reclamado este martes al Gobierno que su decisión de invertir 16.000 millones de euros en el corredor atlántico no afecte la planificación, que a su juicio debe ser "urgente", de nuevas inversiones en el corredor mediterráneo, en especial en la línea de mercancías.

En un comunicado, la entidad ha instado al ejecutivo español a no "desplazar" los esfuerzos que se merece el corredor mediterráneo y a priorizarlo, aunque considera también importante el atlántico. En su opinión, son necesarias nuevas actuaciones para "anticipar" y "resolver a tiempo" futuros cuellos de botella en el corredor mediterráneo, con énfasis especial en el transporte de mercancías.

Galicia, Asturias y Castilla y León reclaman "igualdad" para el Corredor Atlántico

Galicia, Asturias y Castilla y León reclaman "igualdad" para el Corredor Atlántico. / Archivo

Separada de la alta velocidad

También reclama que "se recupere el espíritu" de la mesa estratégica del corredor mediterráneo, impulsada por la Generalitat, y que se priorice la construcción de una plataforma propia de ancho internacional para el transporte de mercancías a lo largo del corredor, separada de la línea de alta velocidad.

La Cambra ha advertido de posibles cuellos de botella en Sant Vicenç de Calders-Martorell, Mollet-Sant Celoni, el entorno metropolitano de Tarragona, su puerto y el clúster petroquímico, y los alrededores de Figueres y Girona.

La línea de Portbou, clave

Además, han asegurado, la línea convencional hacia Portbou es una "pieza clave" en las conexiones ferroviarias transfronterizas entre España y Francia, forma parte del corredor mediterráneo en la red TEN-T. La transformación a ancho internacional de esta línea resulta imprescindible para garantizar en este ámbito del corredor las condiciones de interoperabilidad, garantía de itinerarios, disponibilidad y flexibilidad de servicios exigidas por Bruselas.