Infraestructuras adaptadas

Las estaciones del tramo central de la L9 tendrán cargadores para vehículos eléctricos

El Govern planea un metro cada vez más adaptado a la emergencia climática

Barcelona 15/6/2022 Metro tuneladora para la L9 linea 9 Empiezan otrra vez las obras Represa de les línies L9 i L10 del Metro de la Generalitat (15/06/22) FOTO: Generalitat

Barcelona 15/6/2022 Metro tuneladora para la L9 linea 9 Empiezan otrra vez las obras Represa de les línies L9 i L10 del Metro de la Generalitat (15/06/22) FOTO: Generalitat / LALI PUIG/GENERALITAT DE CATALUNYA

Cristina Buesa

Cristina Buesa

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

"En el 2001, cuando empezamos a planificar la línea 9 nadie hablaba de cambio climático: adaptarse no quiere decir improvisar", defiende la 'project manager' de Infraestructures.cat, Mireia Laguna. La ingeniera, responsable del trazado de metro barcelonés más largo (en kilómetros y años de ejecución), defiende que una de las virtudes de la empresa pública en la que trabaja hace dos décadas es haber sabido leer los tiempos.

Por este motivo, la L9 ya fue pionera en su momento a la hora de elegir una tuneladora de las dimensiones que lo hizo para horadar el subsuelo barcelonés. Y volvió a innovar cuando la obra pública hubo de reinventarse tras el accidente del Carmel. Ha tenido que hacer ingeniería, en este caso financiera, para salvar la crisis que paró todas las infraestructuras. Y, ahora, es el momento de que la emergencia climática replantee ciertos aspectos.

Cuatro kilómetros del tramo central

Esta idea es la que ha llevado a la empresa que ahora depende del Departament de Territori a buscar cómo contribuir a la lucha contra la crisis del clima, más allá del incontestable beneficio del transporte público, cuya finalidad última es sacar coches de la calzada. Actualmente el 40% de las emisiones de Co2 a la atmosfera provienen del tráfico rodado.

¿Cómo hacerlo? Ahora mismo quedan cuatro kilómetros y 15 estaciones por acabar, que permitirán pasar de los 25 millones de usuarios a 113 millones anuales, resume Laguna. Y, en esta unión de los dos extremos de la línea 9, se ha decidido aprovechar la energía de la red ferroviaria y recargar con ella vehículos eléctricos, explica la responsable durante su intervención en el Col·legi d'Enginyeria de Camins, Canals i Ports sobre los retos y soluciones para equipar a Catalunya contra la crisis climática.

Menos emisiones

La fórmula todavía se está acabando de perfilar pero Infraestructures.cat usaría la energía sobrante del metro para servir a vehículos eléctricos, ya fueran de particulares como de la red de buses de transporte público del área metropolitana. El presidente de la empresa, el recién nombrado Oriol Güell, considera que la obligación de la compañía es contribuir al reto de luchar contra la emergencia: "Debemos equipar el país para paliar sus efectos y las infraestructuras deben ayudar".

Los primeros cálculos de la empresa son que con estos cargadores se podrían reducir 5.100 toneladas de Co2 anuales, estima Mireia Laguna, para a continuación aclarar que cada persona emite unas cinco toneladas al año.

Inversiones vigiladas

Junto a ella, la también ingeniera Elena Campelo, responsable en el Banco Europeo de Inversiones (BEI), aprueba la intención de la Generalitat. La evolución de la entidad hacia el Banco del Clima y los acuerdos de París hacen que "ya no se puede financiar nada que tenga que ver con el incremento de consumo de combustibles fósiles ni tampoco en incremento de capacidad de infraestructuras que lo promuevan", describe.

De hecho, en el propio seno de la Generalitat, a la hora de decidir en qué se invierte, el vector ambiental juega un papel clave, añade la jefa de área de Evaluación Económica de Políticas Públicas del Departament d’Economia i Hisenda, María José del Blanco. "Al haber tantas necesidades, se debe estudiar bien en qué se invierte el dinero público", expone.

La línea 9 del metro del área metropolitana de Barcelona lleva más de 20 años reinventándose y adaptándose a los tiempos: el próximo reto, la emergencia climática.

Suscríbete para seguir leyendo