La cantera de la Copa América de vela recala en València

Desde que Barcelona fue elegida para acoger la Copa América de vela, cualquier evento vinculado con esta disciplina huele a preparativo, ensayo o demostración de cara al 2024. Es lo que ha ocurrido estos días en València, donde la celebración de la primera prueba del circuito europeo de la clase 69F ha servido para hacer 'volar' unas embarcaciones como las que se usarán el año próximo, pero a tamaño reducido.

Las regatas que se han disputado frente a las costas de El Saler han mostrado también las artes náuticas de algunos de los tripulantes que aspiran a participar en el que se considera el mayor acontecimiento deportivo tras los Juegos Olímpicos o el Mundial de fútbol. El puerto de Valencia Mar ha sido un banco de pruebas extraordinario para que los deportistas demostraran lo que saben hacer y que los equipos que competirán en Barcelona se fijen en ellos.

Mucha competencia

Es el caso del joven Clément Cron, de 23 años, patrón del equipo francés de Groupe Atlantic. Es uno de los 16 ya elegidos para incorporarse al escuadrón de su país en las pruebas de jóvenes de la Copa América de vela. Explica que es una selección dura y hay mucha competencia, pero el brillo de sus ojos revela que se sabe en el grupo de ocho que finalmente se batirán en aguas catalanas.

Cron, acompañado de Louis Chambet, Valentin Sipan y Jessica Berthoud, se han hecho con el triunfo este domingo en València, frente a otros seis equipos de diversas nacionalidades. Los 69F toman este nombre por los 6.9 metros de eslora y la 'F' de 'foils', que son los apéndices del monocasco que permiten elevarlo del agua y desplazarse a toda velocidad, como si 'volara'. Pueden alcanzar los 35 nudos, unos 65 kilómetros por hora.

Profesionalización del equipo

El AC40, que lleva a cuatro personas a bordo y mide 13 metros, se usará en la competición femenina y en la juvenil mientras que la batalla final de los seis equipos será en octubre del 2024 con los AC75, con ocho tripulantes. Emirates Team New Zealand deberá defender su título frente a quien gane de entre el Ineos Britannia (Gran Bretaña), Alinghi Red Bull Racing (Suiza), Luna Rossa Prada Pirelli (Italia), NYYC American Magic (EEUU) y Orient Express Racing (Francia).

"Cuando yo empecé todo era una aventura, ahora cada vez está todo más profesionalizado y la técnica es muy importante", describe en el puerto de València Mar el director deportivo del equipo Groupe Atlantic, Pierre Mas, toda una leyenda de la vela que cuenta con varias Copa América, vueltas al mundo y otras prestigiosas competiciones.

Un deporte que desgasta

Mas sabe que los cuatro jóvenes veinteañeros tienen talento y por eso los orienta desde la lancha neumática con una mezcla de orgullo y respeto. El desgaste físico en el agua y fuera es enorme, aunque la única chica del equipo finalmente vencedor, Jessica Berthoud, parece siempre fresca y dispuesta.

Se enroló en este deporte tarde, a pesar de que su padre se dedica a ello. Probó primero con la gimnasia y la vela acabó ganando. Tiene la doble nacionalidad neozelandesa y francesa, pero apuesta por competir con los galos de Alinghi Red Bull Team, donde optará a formar parte de la tripulación de jóvenes (que es mixta) o bien de mujeres.

Preregata en Arabia Saudí

"Uno de los equívocos habituales es que creen que trabajo en las oficinas, no que soy tripulante", bromea la joven de 21 años, que junto a sus compañeros viajará a Francia e Italia para seguir con el circuito europeo que ha arrancado en València. La capital del Turia trata de reengancharse a un deporte que le dio grandes momentos de gloria en 2007 y 2010, después de que Barcelona haya recuperado la competición para el Mediterráneo y calcule que el impacto económico de la competición será de 1.200 millones de euros y una generación de 19.000 puestos de trabajo.

La semana pasada, los organizadores, America's Cup Events (ACE), anunciaron que el segundo emplazamiento donde se celebrará la preregata de este 2023 será Jeddah, en Arabia Saudí, a finales de noviembre. El primero será en Vilanova i la Geltrú entre el 14 y el 17 de septiembre. Los monocascos 'vuelan' ya para esas fechas.

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