Rubi: "Me niego a regalar la Copa, la ilusión es máxima"

Con nueve derrotas en los 10 últimos partidos de Liga y la sensación de que el equipo no acaba de encontrar la tecla correcta que le llevó a pelear con los mejores en el comienzo de curso, el Espanyol se asoma a la vuelta de los cuartos de la Copa. El torneo se ha convertido en una válvula de escape para aliviar las penas. Un éxito en el pulso de este miércoles en el Villamarín serviría para animar a la sufrida afición perica, a la que le espera otro examen el próximo domingo en Vila-real.

Ese encuentro puede resultar especialmente dramático si el Espanyol no alcanza las semifinales ante un Betis que se llevó un 1-1 de Cornellà gracias al valioso gol de Sanabria Sanabria a 10 minutos del final. El delantero paraguayo hizo su último servicio para la causa andaluza antes de marcharse cedido al Génova. Los blanquiazules se avanzaron gracias a Borja Iglesias, pero acabaron llevándose un golpe que pone las cosas complicadas en la vuelta.

La montaña rusa de enero

Rubi no reservará nada en una cita clave. Los títulos de este siglo, logrados en el 2000 y el 2006, siempre otorgan un significado especial a la Copa. El mejor resultado del Espanyol más reciente son las semifinales del 2015, cuando el Athletic apeó a los pericos de la final. En la temporada pasada, el camino se detuvo en los cuartos ante el Barça, justo la misma ronda en la que se encuentran ahora blanquiazules y verdiblancos.

"En la montaña rusa de este enero la Copa es ilusión. Pasar a semifinales sería muy importante para nosotros", ha proclamado el técnico, que mantiene su confianza en el equipo. "Me niego a regalar la Copa con todo el esfuerzo que hemos hecho. Se tiene que intentar. Estoy seguro de que cuando pasen estos partidos y el calendario deje de ser tan duro sumaremos puntos". 

"No sé salir a especular"

Frenar la sangría de goles que encaja últimamente el Espanyol es el primer objetivo de un equipo que también necesita marcar para tener opciones. Contener a referentes como Canales y Lo Celso será vital para superar a un rival que también estará muy motivado, especialmente tras conocer este lunes que la final del 25 de mayo se disputará justamente en el Villamarín. final del 25 de mayo

 "No tengo miedo a nada. Chen me ha transmitido que esté tranquilo, que entiende la situación. Creo mucho en este equipo. De aquí a un mes veremos todo de forma diferente" (Rubi)

"La tecla para mejorar fuera de casa la tengo, pero me falta recuperar jugadores. Ellos pueden tener ahora el subidón de que saben que la final se jugará en su estadio. Es otro impulso que debemos frenar", ha agregado Rubi, que no dará un paso atrás en sus planteamientos. "Yo no sé salir a especular. El mensaje nunca será otro que no sea el de ir a buscar el gol".

Reuniones con Chen

El entrenador catalán ha convocado a 20 jugadores. Destaca la baja de Dídac Vilà por molestias y el regreso de Adrià Pedrosa. Rubi ha reconocido que "las últimas horas del mercado serán frenéticas". Ademas de Wu Lei, el club trabaja en la incorporación de un mediocentro y un delantero, especialmente si se marcha finalmente Baptistao. 

Corregir errores y recuperar efectivos es la obsesión del técnico, que se ha reunido en los últimos días con Chen Yansheng. "No tengo miedo a nada. Me ha transmitido que esté tranquilo, que entiende la situación. Creo mucho en este equipo. De aquí a un mes veremos todo de forma diferente", ha concluido el preparador.