3 cervezas artesanas para beber por una buena causa

No se necesitan demasiadas excusas para beberse una buena cerveza artesana, pero si encima tienen una vertiente solidaria, la satisfacción es doble. Estos son tres ejemplos de pequeñas marcas catalanas que se han aliado con entidades sociales –o viceversa– para llevar a cabo ediciones especiales que persiguen recaudar fondos para una causa que vale la pena. Y, además, sin renunciar a la calidad ni gastarse un euro en márketing.

Veïna, la esencia de Sant Antoni

La cerveza siempre ha tenido un fuerte componente local y es de los pocos productos de consumo que siguen vinculándose a un territorio en concreto. Pero en el caso de la Veïna, esto es aún más evidente. Se trata de una Indian Pale Ale (IPA) lanzada por la oenegé De Veí a Veí del barrio de Sant Antoni de Barcelona, en colaboración con la tienda especializada Lambicus.

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El objetivo no es otro que recaudar fondos para las acciones de la asociación, muy centrada en la ayuda directa a vecinos vulnerables del barrio, sobre todo a nivel de alimentación y productos de higiene.

Una IPA fresca y floral que, además, se elaboró de manera colectiva. Explican que, una vez tuvieron la idea, reunieron a distintos voluntarios de la asociación para participar en una cata a ciegas de distintas variedades de cerveza. De las opiniones de todos ellos surgió la Veïna, que se elabora en una cervecera artesana belga (aunque les hubiera gustado que fuera en el mismo Sant Antoni). Eso sí, solo se puede encontrar de momento en el barrio, ya sea en comercios de proximidad o bien en restaurantes como El Racó de l’Aguïr o bares como la mítica Bodega Rafel, entre otros. Ya han agotado una primera tirada y van a por la segunda.

Ètika, el sabor de la inserción laboral

Ampans es una entidad del Bages que trabaja acompañando y promoviendo la inserción laboral para personas con discapacidad intelectual, enfermedad mental o en situación de vulnerabilidad. Y la gastronomía es un buen vehículo para conseguirlo. Por eso, elaboran sus propios quesos bajo la marca de Formatges Muntanyola, así como los vinos Urpina. Desde el pasado diciembre cuentan además con su propia cerveza, en colaboración con la cervecería artesana Guineu.

Se trata de una American Pale Ale (APA), clara y elaborada con cinco tipos de lúpulo diferentes, que ya ha agotado la primera edición. Ahora han lanzado la segunda, con 3.000 botellas. La etiqueta surge de una ilustración elaborada en el taller l’Art de Viure que organiza el centro ocupacional que tienen en Manresa y en el que participan usuarios de la entidad. El proyecto, además, surgió en plena pandemia con el objetivo de tejer alianzas dentro del territorio y sensibilizar sobre la importancia de la producción local y la responsabilidad social.

Attack the Krab!, en pie de guerra contra el cáncer

2D2Dspuma es una de las tiendas de referencia para los cerveceros barceloneses, incluso mucho antes de la explosión del fenómeno artesano. Además de ser bar, distribuidora, tienda ‘on line’ y organizar experiencias en torno a la cerveza, sus propietarias pensaron que aún tenían energía para crear su propia marca, Implika2, sobre todo por diversión. Y dentro de las distintas variedades que ya han visto la luz se encuentra la serie Attack the Krab!, creada para recaudar fondos contra el cáncer sin renunciar a la calidad ni a la experimentación.

A finales del 2019 sacaron la quinta edición y, tras el parón obligado por el coronavirus, ya están pensando en la sexta. En todo caso, siempre son estilos distintos, elaboradas en fábricas diferentes. Y los fondos conseguidos también varían de destino. Por ejemplo, su primera experiencia fue una Imperial Brown Ale con cilantro y cardamomo, cuyos beneficios fueron a parar grupo de investigación del cáncer de ovario del Vall d’Hebron Institut de Recerca. Y la quinta, una Berliner Weisse con sandía y hierbabuena, elaborada junto a Althaia Artesana y El Racó d’en Cesc, para apoyar la investigación contra la leucemia del Institut de Recerca Sant Pau. Ahora, la lucha sigue.