Fiestas polémicas

Los clubs sociales y saunas gay con sesiones de discoteca y 'after' irritan a vecinos y ocio nocturno

La noche menguante de Barcelona: 125 discotecas y pubs cerrados

El sector del ocio nocturno y la FAVB buscarán nuevas ubicaciones para bares y 'discos'

El futuro de la noche de Barcelona: dónde encajar nueva oferta

Club social expedientado por actividad no autorizada, en la calle de Aribau.

Club social expedientado por actividad no autorizada, en la calle de Aribau. / MANU MITRU

Patricia Castán

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Los ‘flyers’ y videos promocionales online son inequívocos: una brillante bola de discoteca sobre una pista de baile, gogós a todo ritmo o un DJ en plena sesión ilustran las fiestas. Una diversión que sería totalmente normal si se tratase de discotecas, pero que desde hace un tiempo se repite en algunos espacios con otra actividad. Algunos clubs sociales y saunas gay están ofreciendo regularmente sesiones de ‘disco’ y ‘afterhours’, en un momento en que Barcelona lleva años sin otorgar permisos de ocio nocturno y tras un largo periodo de cierre de locales de pública concurrencia por quejas vecinales y presión municipal. Ahora, tanto el sector del ocio como residentes de distintas zonas denuncian diversas actividades sin licencia: unos por competencia desleal, y los otros por las presuntas molestias que puedan ocasionar.

Publicidad de las fiestas del club social de Aribau.

Publicidad de las fiestas del club social de Aribau. /

El ayuntamiento ha ido expedientando a distintos locales sin licencia para la actividad que ejercían, aunque la ambigua normativa en el caso de los clubes sociales y la picaresca de la letra pequeña complica el seguimiento de esa oferta. Los clubes irrumpieron hace unos pocos años como fenómeno urbano y resultaban muy atractivos porque limitan el acceso a socios, haciéndolos más exclusivos, y favoreciendo la socialización y hasta el ‘networking’ entre ellos. No pocos cuentan con espacios para puntuales “fiestas privadas”, pero el problema es cuando la pista de baile pasa a ser su razón de ser, señalan desde el sector del ocio. 

Vecinos del Eixample han denunciado a este diario el caso de uno ubicado en la calle de Aribau, autorizado por el ayuntamiento como “casa o centro de reunión o de difusión de la cultura, valores o aficiones de un colectivo específico”. Cabe destacar que la actividad de club social privado solo precisa el régimen de comunicación. Dicho espacio, dirigido especialmente al colectivo LGTBI, organiza entre otras iniciativas fiestas con pinchadiscos semanalmente, con registro gratis y acceso libre, según anuncian literaamente en su propia web y redes sociales. Las sesiones, según se aprecia en sus videos, son para un público variado, con música a todo volumen y coloridos montajes. Un portavoz del local asegura a este diario que las fiestas forman parte de sus estatutos, como actividad, y que han pasado todas las pruebas sonométricas que acreditan que no causan molestias.

Apunta también que algunos residentes del entorno han mostrado desde el principio del proyecto actitudes homófobas contra el establecimiento. Y que realizan otras muchas actividades culturales y sociales que ganarán peso en las próximas semanas.

Sauna de Diputació que acumula infracciones en Barcelona, amenazada de ser clausurada.

Sauna de Diputació que acumula infracciones en Barcelona, y que podría ser clausurada por el ayuntamiento. / Manu Mitru

El consistorio informa que la Guardia Urbana abrió un acta el pasado abril al local, que ha desembocado en un "expediente disciplinario por actividad no ajustada a la licencia". Algunas protestas de los asociados de la patronal Fecasarm han llevado a la entidad a hablar con ayuntamiento y Mossos de este y otros casos, en tanto que aprecian “competencia desleal” respecto a las discotecas que cumplen estrictas reglas del juego en materia de seguridad, impuestos y derechos de autor, defienden.

Los vecinos critican que pese a las restricciones municipales, el formato de club social (supuestamente para socios, pero en la práctica con entrada muy flexible) está abriendo la puerta al ocio nocturno encubierto o ilegal. Otro en la calle de Muntaner también estaría en el punto de mira, apuntan fuentes del sector.

Trampas de puertas adentro

Hasta la fecha, en este ámbito solo se ha precintado "por riesgo para las personas" un local sin licencia que tenía intención de operar bajo el epígrafe de club en la calle de Bruc, aunque al final no culminó los trámites, señalan fuentes del distrito.

Para la otra gran patronal, Fecalon, el fenómeno aflora ante "la falta de licencias de actividad de ocio nocturno que vive hace años la capital catalana, con una oferta cada vez menor". Creen que posibilitando nuevas aperturas reguladas se "evitarían ilegalidades y se cubrirían las necesidades de los noctámbulos con más garantías". De hecho, la proliferación de sesiones ‘disco’ sin licencias al uso fue uno de los puntos que trataron en su reciente reunión con la Federació d’Associacions de Veïns de Barcelona (FAVB) preocupados también por el fenómeno. Otro ejemplo, esta vez en un supuesto estudio de grabación usado como 'after', provocó quejas de los residentes hace poco en el distrito de Sant Martí, hasta acabar siendo clausurado, como informó este diario.

La publicidad en las redes sociales evidencia que establecimientos sin licencia instalan pistas de baile y barras de bar, tras el recorte progresivo de la oferta de ocio nocturno reglada

En el aire queda el reto de encajar correctamente la proliferación de clubes sociales, ya que actualmente no tienen una normativa específica que los regule. Aunque depende de su finalidad “se les exige que tengan determinadas características”, agregan desde el ayuntamiento. Por ejemplo, si albergan un bar para los socios, el nivel de ruido y de aislamiento acústico, será el correspondiente a un bar. Si tienen música, se le exigirá una mayor insonorización. Incluso si contemplan intercambio de parejas, los reservados deberán tener las medidas y elementos de un local de prostitución.

Saunas para bailar

En el caso de las saunas gay, según algunos usuarios, sucede que tras la pandemia y con el 'boom' de los contactos por plataformas digitales, estos espacios han perdido tirón como puntos de interacción o ligue. En cambio, algunos ven una salida en la actividad de ocio nocturno, como también sucede en otras grandes ciudades.

Flyer digital de las fiestas en horario 'after'.

Flyer digital de la sauna expedientada en Diputació. /

En el Eixample, un establecimiento en Diputació anuncia desde hace meses en redes sus fiestas con DJ, pista de baile, 'cruising zone', jacuzzi y 'shows', en horario de madrugada a mediodía, aunque su permiso es de sauna y gimnasio, informa el distrito. De nuevo, los vecinos se quejan de que "los fines de semana se convierte en un 'after'". El local acumula diversos incumplimientos desde finales de 2020, a partir de un acta de la Urbana, donde se constató que en su interior tenían barra de bar, venta de alcohol, espacios para fumar y diversas deficiencias sobre la normativa antiincendios, agrega un portavoz municipal.

Agrega que se les ha abierto expedientes disciplinarios por ruido, consumo de bebidas no alcohólicas y, sobre todo, por "actividad no ajustada" a licencia. El expediente llegó al juzgado contencioso-administrativo, donde sus titulares intentan evitar el cierre, y se les ha impuesto una sanción elevada que no han abonado y que ahora se tramita por la vía ejecutiva, según el ayuntamiento.

Del mismo grupo ha estado en el punto de mira la sauna de Casanova 57, que abre las 24 horas y donde cinco clientes se intoxicaron por drogas en marzo. El 18 de abril se precintó cautelarmente a instancias de Bomberos y Guardia Urbana por incumplir normativas de seguridad graves, aunque posteriormente fueron subsanadas. Sus operadores aseguran que allí no se celebran fiestas, y que la droga la ingirió el grupo afectado. Denuncian incluso conductas de homofobia en un representante de la policía local, que condujo al cierre temporal y que han pedido que se investigue

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