Una semana para las municipales

El camino que abrió Manuel Valls: los mil gobiernos posibles en Barcelona

¿Llegó demasiado prontó Xavier Trias a su 'prime'?

Por qué Fredo Corleone no será alcalde de Barcelona

¿Está llena Barcelona llena de gente que votará a Colau y no se atreve a decirlo?

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Toni Sust

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Hacer una previa recopilatoria de cuáles son los gobiernos posibles que puede tener Barcelona tras las elecciones municipales presenta el riesgo evidente de que al final el que cuaje no esté citado en esta pieza. Pero la vida es riesgo.

A la vista de lo que nos enseñó Manuel Valls, ya todo el mundo está prevenido de que cualquier sorpresa es posible. Estas son las fórmulas que podrían oficializarse en el pleno de investidura, el próximo 17 de junio, 20 días después de las municipales.

Trias prereservó el pabellón de la Vall d'Hebron para su mitin final, pero finalmente cambió de sitio y Collboni cerrará su campaña allí

Un gobierno monocolor

La opción más sencilla es que un partido gane las municipales con mayoría absoluta, 21 concejales de los 41, y dirija la ciudad sin tener que consultar nada a nadie. Pero nunca en Barcelona un alcaldable lo ha logrado. Ni Pasqual Maragall, que obtuvo 21 ediles en 1983 y 1987, cuando la absoluta estaba en 22.

Una posibilidad más asequible: que el partido que gane gobierne solo en minoría, buscando acuerdos para las votaciones relevantes. Eso hizo Xavier Trias como alcalde de CiU en Barcelona de 2011 a 2015. Aunque se apoyó en el PP, no tuvo socios de gobierno. Tenía 14 concejales. Ada Colau hizo lo mismo de 2015 a 2019, menos el año y medio que tuvo como socio de gobierno al PSC.

A la vista de las encuestas, tanto Trias como Colau, y como al alcaldable del PSC, Jaume Collboni, tienen opciones de ganar las elecciones, aunque sin mayoría absoluta. Si entre los partidos que no ganen no hay un acuerdo que sume 21 ediles, el ganador será alcalde y deberá administrar su fragilidad. Si los otros partidos suman 21 ediles y eligen a otro como alcalde, el ganador que no llegue a esa cifra podría verse en la oposición, como le pasó a Ernest Maragall en 2019.

Un gobierno de seis meses

Entre las hipótesis que circulan corre la de que el presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, quiera esperar a que pasen las elecciones generales, que no pueden celebrarse más tarde del próximo 10 de diciembre, para cerrar pactos municipales en Barcelona, con el fin de evitar problemas para su campaña.

Eso supondría que el ganador de las elecciones sería el alcalde durante seis meses en solitario, y que en enero los socialistas cerrarían los acuerdos necesarios para formar un gobierno de coalición.

Un mandato con dos alcaldes

En la hipótesis anterior, si el ganador fuera Collboni, en medio año podría oficializar la entrada de un socio de gobierno. Si los ganadores fueran Colau o Trias, y gobernaran en solitario a partir de junio, el PSC podría sumarse como socio menor en enero o buscar un acuerdo con terceros para sumar 21 ediles y desalojar a Trias o Colau, el que mande, para convertir a Collboni en alcalde.

Es una operación compleja, la de echar así a un regidor tan poco tiempo después de las elecciones, pero nada que no se haya visto en ayuntamientos más pequeños desde que el mundo es mundo.

Dos años cada uno

En cambio, no suena tan extraña la posibilidad de que dos de las candidaturas acuerden repartirse el mandato, de manera que Barcelona tenga un alcalde 2023 a 2025 y otro de 2025 a 2027.

Los Comuns sostienen que en 2019 lo ofrecieron a ERC durante los días de negociación previos a que Valls, Eva Parera y Celestino Corbacho dieran su voto a Colau. Los republicanos lo niegan.

Tripartito de izquierdas

Colau postula un tripartito de izquierdas, formado por Barcelona en Comú, el PSC y ERC. La alcaldesa recalca que en el fondo es lo que ha regido este mandato, porque las principales decisiones se han tomado con los votos de los Comuns, los socialistas, socios de gobierno, y los republicanos, apoyo externo habitual.

Otro acuerdo posible es entre BComú, ERC y la CUP, pero los sondeos dicen que los antisistema lo tienen muy difícil para entrar en el consistorio y que los republicanos están más cerca de los cinco concejales que de los 10. Por lo tanto, Colau podría cerrar un pacto a dos con ERC, pero difícilmente sumarían la mayoría absoluta. Por afinidad independentista, Junts y ERC también podrían pactar, pero no es algo que parezca cercano ni aritméticamente suficiente para gobernar.

Sociovergencia o sociocolauismo

A la vista de las encuestas el PSC y Junts sí podrían llegar a los 21 concejales. Trias ya ha dicho que hará lo necesario para que Colau no sea alcaldesa, lo que abre la puerta a que vote a Collboni, aunque el posconvergente también ha defendido que quien gane sea alcalde.

El socialista sostiene que si no gana se irá a la oposición y no será el socio menor de ningún gobierno. También podría darse un pacto PSC-Comuns, como el vigente. Es evidente que ahora mismo las dos partes se detestan, pero eso nunca ha impedido una alianza provechosa entre partidos.

La operación Sirera

Si cumple su palabra, y los concejales socialistas le votan a él pase lo que pase, Collboni excluye así que Trias pueda ser alcalde con el apoyo socialista. El alcaldable del PSC tiene una ventaja que nadie atesora: puede pactar a derecha, con Trias, o a izquierda, con Colau. Y ha abierto la puerta a ser investido aunque no gane.

Luego exista la posibilidad de que Trias y Collboni no sumen los 21 concejales. El alcaldable del PP, Daniel Sirera, ya ha dejado más que claro que ahí estará él para completar la cifra e impedir que Colau vuelva a ser alcaldesa. El PP, dicen fuentes populares, no impediría ese desenlace. Es decir, que Alberto Núñez Feijóo no lo vetará. Luego hay una última derivada diabólica: que Vox entre en el ayuntamiento con dos o tres ediles, y que esos votos acaben decantando la investidura en un sentido u otro.

Trias ‘cede’ Vall d’Hebron a Collboni

Como es lógico, las candidaturas preparaban con tiempo la elección de los lugares en los que harán los mítines de campaña. Y más, para las grandes citas. También rectifican. Junts había hecho una preserva para celebrar el mitin final en el pabellón de la Vall d’Hebron. Finalmente la anularon. Y quién hará en ese pabellón su mitin final será el alcaldable del PSC. Jaume Collboni.

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