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Diálogo de Emilio Pérez de Rozas y Juan Cruz sobre el Barça y periodismo: "Al Barça le falta siempre explicar el segundo párrafo"

Juan Cruz y Emilio Pérez de Rozas

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Albert Guasch

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Un diálogo entre Emilio Pérez de Rozas (71 años) y Juan Cruz (74 años) daría para un largo documental. Aquí se les ha pedido cierta contención verbal. “¡A vaya dos vas a pedir eso!”, exclama el primero. La idea es hablar fundamentalmente del Barça, objeto de muchas de sus columnas, sobre todo de Emilio, y objeto de su pasión, sobre todo de Juan. Hablando del Barça se cuelan observaciones sobre el periodismo deportivo. Ambos tienen memoria, tienen opiniones y tienen reconocimiento profesional. Son seguramente los periodistas más rápidos en cerrar un texto que uno haya visto nunca. Abramos el fuego amigo por aquí.

Emilio Pérez de Rozas y Juan Cruz dialogan sobre el Barça y periodismo

Pregunta: ¿Quién escribe más deprisa de los dos?

Emilio Pérez de Rozas: Yo.

Pregunta: ¿Seguro? ¿Juan?

Juan Cruz: Yo escribo rápido cuando no estoy contento. Lo del fútbol lo escribo muy rápido. Siempre que tengo una metáfora o un recuerdo, me sale enseguida. El fútbol me gustó desde niño, es algo que tengo dentro de mi, por lo tanto es fácil. Por ejemplo, se muere Luis Suárez y yo estoy lleno de recuerdos de él. En el futbol, para mi, no hay nada mejor que tener memoria. Porque el fútbol es memoria, no es una ciencia exacta. Entonces si yo me acuerdo de la alineación del Barça de la época en que me hice aficionado, que fue cuando yo tenía 11 años, ya tengo un montón de cosas que contar. El fútbol es lo que recuerdas.

EPR: Lo de escribir deprisa lo hemos aprendido de la inmediatez de cerrar las páginas de un periódico. Siempre cuento la anécdota de que cuando un periodista de otra sección venía a hacer una crónica complementaria de un partido a las diez de la noche en el Camp Nou, nosotros justo al acabar el partido teníamos entregado el material y el periodista de otra sección que nos ayudaba ese día decía: ‘pero yo no entiendo cómo lo podéis hacer. Ah, amigo, bienvenido al club de la rapidez’. Y después, está mal que lo diga, siempre recuerdo una frase de nuestro maestro Antonio Franco que solía decirme que yo escribo deprisa porque escribo como hablo, así que es fácil que enseguida me salga lo que pienso. Juan dice que se puede partir de una anécdota o recuerdos y yo cuando me pongo a escribir, casi estoy convirtiendo en letra aquello que acabo de hablar con un amigo o un compañero. En un 80% son cosas que he hablado o conversado con un montón de gente.

JC: A mi me da vergüenza decir que escribo rápido porque todo el mundo lo toma como algo peyorativo. Y yo no sé no escribir rápido.

EPR: Exacto.

Pregunta: Vamos al Barça. Una pregunta genérica para empezar. ¿Qué os parece cómo se está reforzando el equipo?

JC: Yo tengo la costumbre de creer siempre en el Barça. Soy incapaz de ser crítico con el club. Si el Barça ficha a quien sea, siempre pienso que hay algo por encima de los directivos que es el Barça. Y que fue al Barça a quien se le ocurrió, no a Laporta o Alemany, sino al Barça. El Barça es como si fuera un amigo mío que se lo sabe todo. Claro, no es verdad, se le ocurre a mucha gente, pero yo he interiorizado tanto el Barça que para mi es como una persona. Yo le tengo tanto afecto que cuando toma una decisión no pienso: ‘hombre, no, qué mal lo ha hecho’. Luego ya vendrán los jugadores, jugarán bien o mal, pero el Barça es siempre más que un club, es un ‘amic’.

EPR: Evidentemente se está reforzando bien, pero seguimos en el pronóstico de que tenemos que ganar la Champions, de que casi somos favoritos. Yo creo que estamos acelerando demasiado todo, que estamos en una locura vertiginosa hacia lo que muchos consideran un suicidio, que es esto de las palancas, meter dinero y venga… Yo era más partidario, como bastante gente, pero sobre todo gente silenciosa, de que el aterrizaje de Laporta tendría que haber sido más real, más sincero, más modesto, menos ‘pit i collons’, menos palancas, menos tenemos que ganar y ganar, pegándonos así tortazos, como pagar millonadas por un Ferran Torres… Y ahora creo, por las palabras que oigo de Laporta (“tenemos mejor equipo que el Madrid, vamos por la Champions”), que estamos, no tanto en el suicidio colectivo porque se ha ganado la Liga por un montón de puntos, sino en una dinámica que es contraria a lo que a mi me habría gustado, que es pausa, vamos a construir un equipo, estamos tranquilos, vamos a recuperarnos juntos, vamos a construir el estadio poco a poco, vamos a creer en los jóvenes… Y eso no ha ocurrido. Y yo, que creía que Xavi se iba a distanciar de este discurso tan loco y voraz de Laporta, resulta que se ha añadido. Eso me produce vértigo y creo que el barcelonismo habría aceptado un proyecto mucho más pausado.

JC: Fíjate, yo tengo con respecto a Laporta un problema de comprensión. Yo nunca he entendido el papel de Laporta el día que Messi lloró. ¿Qué hacía Laporta ahí? Laporta no había hecho bien la gestión de Messi. Al menos a mi no me quedó claro.

Laporta y Gündogan, en la presentación del alemán en la ciudad deportiva del Barça.

Laporta y Gündogan, en la presentación del alemán en la ciudad deportiva del Barça. / Reuters

EPR: Perdona que te interrumpa, ahí Juan intervinieron las personas por encima del ser humano Barça que tu consideras que existe.

JC: De hecho, a mi me pareció que si lloraba esa persona es que antes pasó algo, por algo se rompió ese muchacho. Y si fue porque no lo hicieron bien, seguramente Laporta no tenía que estar ahí si no es para explicar el llanto. Laporta nunca ha explicado bien qué pasó con Messi. Ahora tampoco lo ha hecho. Y si las personas no explican, son como los periódicos. Si los periódicos dejan que el segundo párrafo lo explique la gente, la gente dice: ‘oye, que yo he comprado el periódico para que me expliquen el segundo párrafo, no para que yo me lo invente’. Y en el Barça falta casi siempre explicar los segundos párrafos de casi todo lo que ha sucedido en los últimos tiempos.

EPR: En la línea de lo que dices, cuando tu te encuentras a Xavi en un restaurante de Barcelona, a menudo las cosas que te explica son escalofriantes. Y cuando digo escalofriantes, me refiero a que esa petición tuya de explicar el segundo párrafo, creo que Xavi se reprime mucho en explicar siempre el segundo párrafo. Él es quien mejor conoce la realidad, más tiene en su cabeza el proyecto que podría tener el Barça de estos años en crisis y sin embargo no lo ha defendido. Se ha subido al tren de alta velocidad que ha puesto en marcha Laporta y veremos lo que ocurre. Tiene un punto de insensatez pero no se atreve porque pone en peligro, supongo, su puesto de trabajo. Y hablando de su puesto de trabajo, es increíble que haya empezado la temporada y aún no esté renovado.

JC: Esta es otra historia que me sorprende de Barcelona. Cuando yo me hice del Barça, con 11 años, mi primera impresión del Barça y de Barcelona es que era todo perfecto. Me fui dando cuenta de que no era así a lo largo del tiempo.

EPR: Cuando te fuiste a Madrid, ¿no?

JC: Madrid me parece igual de imperfecto. Lo que pasa es que para mi Barcelona siempre fue ejemplo de perfección: las revistas, los periódicos… Y el Barça formaba parte de esa calidad. De pronto empiezan a ocurrir cosas: como que se dejan cosas a medias, no solo el segundo párrafo, no tiene ni el primero escrito en un montón de cosas. Sucedió con Luis Suárez, que no se fue porque quisiera irse, sino porque el Barça no resolvió bien de la relación de la aifión con él. Y nosotros, los que somos del Barça, tenemos esa espina clavada. ¿Por qué se fue Luis Suárez?

La presentación de Leo Messi en el Inter Miami CF.

La presentación de Leo Messi en el Inter Miami CF. /

EPR: Y luego logró el Balón de Oro fuera del Barça. Como Messi, campeón del mundo.

JC: Claro, el Barça no lo ha capitalizado. Ni a uno ni a otro. Les contaré una anécdota: yo fui de parte de la empresa en que trabajaba al entierro del hijo de Lara, el editor. Yo me había hecho amigo del abogado de Messi. Y este abogado, argentino, le pregunté: ‘¿Tú hablas con la directiva del Barça sobre las cuestiones que el jugador tiene pendiente con la justicia?’ Y me dice: ‘no, no conozco a nadie de la directiva. ¿Nunca se han dirigido a ti?. Pues no’. Entonces, en ese entierro me encontré con Bartomeu y me acuerdo que dentro de la iglesia le dije: ‘mire, soy amigo del abogado de Messi, y me dice que usted y él nunca han hablado. Usted quiere hablar con él? Me interesaría mucho’. A mi resultó alarmante. Al cabo de unos días me suena el teléfono y es Carles Naval, el delegado, y me dice: ‘Oye, Juan, tu estuviste el otro día con el presidente, ¿me podrías dar el teléfono del abogado de Messi?’ Me pareció todo artesanal.

EPR: Artesanal, no, esperpéntico.

Pregunta: En Barcelona siempre decimos que el periodismo de aquí es mucho más crítico y fiscalilzador con el Barça que en Madrid con el Real Madrid. ¿Estáis de acuerdo? ¿Y siempre ha sido así?

JC: Yo tengo una opinión. El Barça, con serlo, es mucho menos arrogante que el Real Madrid y sus aficionados. Cuando dices cualquier cosa que objetivamente puede ser grave o defectuoso del equipo, te responden: ‘pues anda que el Barça’. El Madrid es más comparativo, nosotros somos más autocríticos, me parece a mi.

EPR: El poder está en Madrid. Cuando cualquier cosa se narra o se cuenta desde Madrid, parece más cierta y mucho más ruidosa. Y después, este poder que ya posee la capital y sus medios, se refuerza con el poder de la presidencia del Madrid, que es tremendo, arrollador, dañino y ofensivo con los medios de comunicación de Madrid. En Barcelona, que además de ser más atrevidos y más autocriticos, sucede que no tenemos miedo de que nos señalen como herejes por criticar lo que dice Juan, de que el Barça siempre lo deja todo a medias. No tenemos ningún miedo de que en un momento determinado alguien llame a nuestro director y le diga: ‘¿oye, cómo es posible que hayan escrito esto?’. Sabemos que nuestro director, en este caso Albert Saez, en el caso supremo de Antonio Franco, no se dejaría intimidar ni nada. Yo recuerdo que trabajando con Franco, de vez en cuando se acercaba a nuestra sección de deportes y decía: ‘menuda mierda de sección que estáis haciendo’. Y entonces, nosotros, que teníamos la sensación de que estábamos haciendo, sino una extraordinaria, una buena sección, le mirábamos y decíamos: ‘pero, por qué, Antonio?’ ‘Hace 15 días que no me llama nadie a mi despacho cagándose en mi. Debéis estar haciendo una mierda de sección’. Esto te permite una llibertad muy bonita, muy cojonuda, para todo aquel que quiera, desde el punto de vista informativo, de opinión u ideológico, criticar todo lo que quiera. Yo creo que en Madrid hay muchos periodistas que trabajan un poco asustados, porque Florentino Pérez no llama a su director, sino a su dueño. Lo cual lo hace todo un poco complicado.

JC: Desde hace poco se ha producido una revelación muy delicada sobre el Barça, que es el tema de los árbitros. Antes de que eso se consolidara como asunto, el Barça ya estaba condenado. Últimamente, el Barça futbolisticamente ha tenido más éxitos que el Madrid. Cada vez que el Barça ha reiterado uno de esos éxitos, por ejemplo ganar 1-0, que también es un buen resultado, periodistas importantes y muy influyentes de Madrid adobaban la noticia con que el Barça ganaba otro partido con la siguiente reflexión: todavía el club no ha explicado lo de los árbitros. Es decir, el Barça ha sido sometido a un escritinio en los últimos tiempos que ha exagerado sus problemas para que el Madrid no los tuviera, y ha despreciado sus éxitos. Al Barça se le ha tratado con mucha displicencia y eso a mi me ha molestado por parte del periodismo que se hace en Madrid.

Pregunta: ¿Creéis que habría tenido el mismo vuelo si el caso Negreira hubiera afectado al Madrid?

JC: Lo que no ha ocurrido no me gusta reflejarlo como ocurrido, pero si es cierto que el Real Madrid se personó en la acusación y eso es insólito porque no se vio afectado por el caso. El Real Madrid quería que eso no dejara de ser noticia y procuró que no fuera noticia un asunto relativo a un futbolista suyo que pegó a otro jugador.

EPR: Yo voy a contestar con una cosa de estos días. Toda la investigación del Daily Telegraph se ha tapado absolutamente desde Madrid. Y es una investigación que debería tener sus secuelas porque está muy documentado y dice que el Madrid está cometiendo irregularides en sus cuentas. Eso no ha tenido ni una décima parte del eco del caso Negreira, siendo el caso Negreira tremendamente grave que el Barcelona haya pagado al número dos del arbitraje español. Pero en el caso del Telegraph tenemos un ejemplo claro de que probablemente no hubiera tenido el mismo eco.

JC: La influencia que ha ejercido Florentino Pérez sobre los medios en concreto y ayudantes externos e internos que tienen negocios que dependen del Real Madrid, de una manera u otro han convertido al Madrid en inmune. Mientras, el Barcelona es el pupas, todo lo que le sucede tiene entre 3 y 8 columnas; lo que le pasa al Madrid es una nota a pie de página.

Xavi dirige al Barça durante su primer entrenamiento en el Memorial Coliseum de Los Ángeles.

Xavi dirige al Barça durante su primer entrenamiento en el Memorial Coliseum de Los Ángeles. / FCBARCELONA

Pregunta: Rematemos esto. ¿Cómo veis el periodismo deportivo actual? ¿Adónde creéis que va?

JC: Que empiece el maestro.

EPR: Tengo la sensación que está aumentando el periodismo de camiseta, por desgracia. Mi papá decía una cosa cuando leía informaciones dulces sobre el Barça o el Madrid y sospechaba que ese periodista estaba vendido. Decía: ‘Es peor que estar vendido, porque si estuviera vendido aún sacaría algo; lo peor es que está regalado’. Tengo la sensación de que actualmente hay muchos periodistas regalados. Que les gusta adular, que les gusta escribir al dictado, presumir de que conocen a alguien… Y respecto al periodismo práctico, creo que deberíamos hacer otro vídeo de estos para hablar de elllo porque las nuevas tecnologías han cambado totalmente las formas de transmitir , el escaparate y la forma de comunicar. Sigo pensando que todo lo que tenga que ver con el minuto a minuto, la ficha, el resultado, debería de salir en las webs y deberíamos intentar mantener vivo el papel con temas más reflexivos, más opinativos, con reportajes, con explicaciones... Es complicado pero lo ideal sería que la gente leyera sobre un partido en la web, con el resultado, y con el papel al día siguiente tuviéramos tiempo de poder hacer una reflexión sobre ese partido, pero sin repetir la crónica, la ficha, las calificaciones… Creo que el papel debería convertirse en un reducto más opinativo, más de calidad, aunque eso cuesta dinero, cuesta gente y cuesta tiempo.

JC: Estoy de acuerdo. Hay una tradición muy antigua de contar el fútbol. Había un periodista que era Antonio Valencia, que también era escritor, que hacía las cróncias del Madrid.

EPR: También Delibes, ¿no?

JC: Y Antonio Valencia era metafórico y concreto. Él explicaba cómo se ha desplazaban los equipos. Y para eso hace falta un cronista casi musical. Y muchas veces se descuidan en las retransimisiones de radio o televisión, y en los periódicos, la belleza que va inherente a la resolución de las jugadas y también al modo de ser de los futbolistas en el campo, el modo de dolerse, o de alegrarse. Antes en El País era obligatorio que las fotos desprendieran emoción, dureza… Es que la vida es así.