Víctor Font afirma que el Barça de Laporta "está peor" que el de Bartomeu

Dos años y medio después de las elecciones, el Barça "está peor". Así opina Víctor Font, uno de los contendientes en las elecciones de marzo de 2021 que ganó Joan Laporta. La promesa de cambio y de regeneración del actual presidente no se han cumplido. Se ha conquistado la Liga de fútbol, y ese es el único factor que genera "satisfacción" en el excandidato, que expresó su "tristeza, decepción y mucha, mucha preocupación" por el estado real de la entidad.

"El club está peor que hace dos años en cuanto a números: tenemos más gastos, más pérdidas, más deudas y menos patrimonio, y eso no son opiniones, sino datos", aseguraba Font, que hacía una nueva comparación, un año después de la última, porque su estilo de hacer oposición no consiste en emitir críticas periódicas, sino en expresar su punto de vista al menos una vez en la temporada, y por la voluntad de expresar la voz de las 17.000 personas que le votaron (16.679, un 29,99 %) el 7 de marzo de 2021.

Víctor Font, sobre el segundo aniversario de Laporta: "Con visión, transparencia y honestidad se puede alejar al club de los riesgos existentes"

Font lamentó que Laporta "haya sido incapaz" de "aunar talentos y voluntad" para reconstruir el Barça ruinoso que dejó Josep Maria Bartomeu, forzado a presentar la dimisión después de que prosperara la moción de censura, impulsada, entre varios colectivos, por Font. "La herencia que dejaría ahora Laporta es peor de la que recibió", valoraba.

El mayor error: perder a Messi

Uno de los mayores errores, por no decir el mayor, fue perder a Leo Messi en el verano de 2021. "Que Leo se marchara y que no no haya vuelto es un problema de liderazgo y de gestión”, reprendió Font a Laporta, ironizando con que "con un asado y un abrazo a un maniquí no se arreglan las cosas", en alusión a las soluciones que en su día pensaba utilizar el actual presidente para convencer al astro argentino.

Font, en cambio, insinuó que su fórmula era parecida a la que ha convencido a Leo para fichar por el Inter de Miami, vinculada a otros acuerdos, para que su figura como mito perdurara como la de Michael Jordan, "que sigue ganando más dinero del que ganó como jugador de baloncesto". El mejor futbolista de la historia se marchó del Barça, despedido de un día para otro. A punto ha estado de volver, terminado el contrato con el Paris Saint Germain. Leo fue quien llamó para regresar al Barça -a Xavi, en particular-, corroboró Font, pero Laporta "no ha creado las condiciones" para que el 10 vistiera de nuevo de azulgrana.

El empresario de Granollers ve más factible que se produzca otro retorno sonado, el de Pep Guardiola, "si somos capaces de crear las condiciones oportunas para que esto sea posible. "Si puede ser hoy mejor que mañana", apremió Font, consciente de que al entrenador del City le quedan dos años de contrato. Habló en plural, pero se refería a sí mismo y a su grupo de colaboradores, algunos de ellos presentes en la comparecencia.

Font explicó que estuvo en Estambul y departió con Guardiola, Txiki Begiristain y Ferran Soriano. Consideraba insólito que "todo ese talento, que es barcelonista, esté trabajando para la competencia; en la fiesta de Estambul había culés por todos lados". "No puede ser que el City sea la marca más valorada, y no el Barça, porque se ha hecho con talento culé", resumió.

"No puede ser que el City sea la marca más valorada, y no el Barça, porque se ha hecho con talento culé"

— Víctor Font / Excandidato a la presidencia

Font sigue abogando por un cambio del modelo de gestión, "sin un presidente que se ponga el traje de Superman".

El Barça "tridimensional"

Y la receta de Font es pensar en "un Barça tridimensional" que huya de "las trincheras" y adopte un nuevo modelo de gestión, "sin un presidente que se ponga el traje de Superman" creyendo que solucionará él todos los problemas. Ese Barça tridimensional pasa por la división de la entidad en la parcela económica, la deportiva, que lideraría Guardiola, y la institucional.

Las cuentas de Font estiman que el Barça ha perdido mil millones en el ejercicio ordinario con Laporta, entre los casi 500 millones de la primera campaña (20-21), compartida con Bartomeu y la junta gestora, los 169 millones de la anterior (21-22) y los cerca de 250 millones que se prevén, de la actual dejando al margen los ingresos de las palancas. Calcula, además, que la masa salarial "cuesta 30 millones más que la de Bartomeu con su mala gestión".

Ese es uno de los motivos por los que instaba al presidente a abrirse a escuchar a los culés que sean ayudar, como es su caso. Font lamenta que Laporta no haya querido sentarse con él ni una vez desde que es presidente. Hubo una cita y se canceló cinco minutos antes. Reiteró su oferta a "ayudar" y a aportar el programa "más profesionalizado y transparente, con gente capaz" que tenía en las elecciones. Parte de él sí ha sido adoptado por la actual junta. Al menos, en el fichaje de Xavi Hernández. "La mejor decisión, sin duda, del mandato". El peor, dicho y escrito está, fue perder a Messi; error agravado porque el Barça no ha podido capitalizar, abundó, su título de campeón del mundo con Argentina.

Sobre la elección de Limak: "No creo que los criterios más relevantes sea optar por quien lo hace más rápido y más barato".

Font se ufanó también de que LaLiga haya aprobado el plan de viabilidad del Barça que equiparó al "plan de choque" preparado por la candidatura que lideraba si vencía en las elecciones.

La opacidad con Limak

Su plan sobre el Espai Barça no incluía, recordó, el exilio de Montjuïc, sino compaginar las obras de remodelación con la actividad futbolística en el estadio. Insinuó que no habría apostado por una firma desconocida como la turca Limak Construction. "No creo que los criterios más relevantes para una decisión así sea optar por quien lo hace más rápido y más barato en un proyecto así en una casa que nos tiene que durar cien años", sostenía.

Laporta precisa en 1.472 millones de euros el coste del Espai Barça

Rápido tal vez lo sea si se cumple la perspectiva de que el equipo reaparezca en el Camp Nou en noviembre de 2024; barato, en absoluto lo es. Aunque la financiación gestionada sea de 1.472 millones de euros, según precisó Laporta ante el Senat del Barça, las obligaciones financieras contraídas atrasarán la obtención de beneficios. "La otra parte que no se nos ha explicado es que los prestadores de dinero tendrán mucho que decir en temas que afectan a la actividad económica", añadió Font, incidiendo en la opacidad en la gestión de Laporta. También criticó el trasiego de comisiones en los fichajes, aludiendo a la relación de Deco y Alejandro Echevarría, el excuñado del presidente y cuyo papel en el club no está nada claro pese a su presencia en algunas reuniones.