UN EQUIPO QUE NO SE RINDE
El Barça se instala en la zona Cesarini
El gol de Dembélé al Valladolid remarca la capacidad de lucha del equipo para marcar hasta el último instante
Los azulgranas han anotado cinco tantos que fueron definitivos entre los minutos 85 y 90 para ganar
Griezmann y Alba igualaron un 2-0 en contra que dio paso a la prórroga ante el Granada, igual que Piqué ante el Sevilla
Trincâo firmó el triunfo sobre el Betis, y otros nueve tantos sirvieron para ampliar marcadores
Joan Domènech
Periodista
Periodista. Título de Entrenador de fútbol nivel A. Deportista vocacional. Tras retirarme como futbolista, empecé a trabajar en Mundo Deportivo (12 años, 1988-2000). He asistido a cuatro Mundiales y cuatro Eurocopas. Coautor de varios libros. Miembro del colectivo ‘Periodistes Solidaris’ y 'Amics de Johan'.
El gol de Ousmane Dembélé invita a pensar que el Barça es un visitante habitual a la elogiada (y también prestigiosa, en cierto sentido) Zona Cesarini. El agónico tanto del delantero francés brindó un triunfo que los azulgranas andaban buscando con más desespero que acierto, estableciendo una sentencia ante la que el Valladolid no tuvo tiempo de recurrir. El minuto 90 se cumplió con los futbolistas aún celebrando el gol, y los cuatro minutos de tiempo añadido era un periodo demasiado breve para el rival.
Renato Cesarini fue un delantero italo-argentino que se caracterizó por marcar goles en el último suspiro
La llamada Zona Cesarini es un término que toma su nombre de Renato Cesarini (Senigallia, Italia, 1906-Buenos Aires, 1969), un delantero italo-argentino que se caracterizó por marcar goles en el último suspiro que tuvieron categoría de decisivos; los más relevantes los anotó en dos partidos de Italia, ante Suiza y Hungría (1931 y 1932), en los que firmó sendos tantos que significaron el empate y la victoria, respectivamente.
Visitas frecuentes
El gol de Dembélé, sin ir más lejos. El de Sergi Roberto al Paris Saint Germain (2017). El de Andrés Iniesta al Chelsea (2009). Ejemplos claros de lo que, en un principio, un periodista definió como caso Cesarini y ahora es un periodo de tiempo (breve) y una situación: un gol que tiene relevancia en el resultado.
El once de Koeman ha anotado 14 goles en los cinco minutos postreros más 6 en prórrogas
La visita del Barça a la zona Cesarini no ha sido esporádica; está siendo frecuente, y eso es una novedad. El equipo de Ronald Koeman ha adquirido la virtud, tantas veces envidiada por los culés al Real Madrid, de marcar goles cuando se está agotando el tiempo de juego.
Este Barça no se rinde. El espíritu de trabajo y la persistencia que ha exhibido el conjunto azulgrana le ha permitido sacar adelante marcadores al borde de la agonía, negándose a la rendición. La solución de la fe ha paliado el problema de llegar a la hora límite sin haber terminado el trabajo, la incapacidad para trasladar al marcador la teórica superioridad futbolística ante un rival inferior. Hasta que Dembélé salió al rescate y se puso el traje de héroe.
En la campaña 18-19 hubo 25 goles 'cesarínicos' que sirvieron para ligar el doblete Liga y Copa
Seis tantos en las prórrogas
El Barça ha marcado 14 goles entre el minuto 85 y el 90 (o los que correspondan, con los añadidos, al tiempo reglamentario) y otros 6 en tres de las cinco prórrogas disputadas. El año pasado, para establecer un contexto, hubo 9 goles en esa franja, de los que 3 sirvieron para ganar. Y en la campaña 18-19, fueron 25, 9 concluyentes para el desenlace de los partidos que, a la postre, derivaron en la conquista del doblete de Liga y Copa.
Tan determinante como el aplaudido (desde el confinamiento del hogar) gol de Dembélé fue el de Francisco Trincâo en el campo del Betis, que dio el triunfo por 2-3 (m. 87) después de que el once verdiblanco empatara en el minuto 74. O los dos goles de Griezmann (m. 88) y Alba (m. 92) que igualaron el 2-0 del Granada en la Copa y dieron paso a la prórroga, donde ambos repitieron y De Jong colaboró (3-5).
Esperando a Messi
También fue cesarínico el de Gerard Piqué al Sevilla: el 2-0 en el minuto 93 que iguala el resultado de la ida y forzaba la prórroga. Martin Braithwaite, en el cuarto minuto extra, sentenció la eliminatoria. Dembélé y Braithwaite marcaron los tantos de la prórroga frente al Cornellà, también en la Copa. Leo Messi no ha sido llamado a intervenir en la gloria postrera, como si se reservara para las citas sobresalientes aún pendientes en el calendario. Nueve tantos más a lo largo de la temporada sirvieron para ampliar victorias o agrandar goleadas.
Por contra, el Barça ha encajado seis tantos cesarinis, pero solo dos fueron trascendentes: el de Villalibre para el Athletic que dio paso a la prórroga de la final de la Supercopa, luego rematada por Williams (2-3) y el del empate (1-1) del Cádiz en el Camp Nou con el penalti cometido por Clément Lenglet y transformado por Álex Fernández.
Cesarini da su nombre a una escuela de fútbol en Rosario y tiene una calle en Roma. No jugó en ningún club de ninguna de las dos ciudades.
- Hacienda te devuelve 300 euros si tienes un hijo menor de 25 años y 900 si tienes dos: así tienes que ponerlo en la declaración de la renta
- Muere Itxaso Mardones, reportera de Gloria Serra en 'Equipo de investigación', a los 45 años
- Adiós a los cajones de la cocina: la solución con perchas que puedes colocar en cualquier parte
- Pedro Sánchez se plantea renunciar como presidente del Gobierno tras la investigación a su mujer
- El CIS publica una encuesta sobre las elecciones en Catalunya a pocas horas del comienzo de la campaña
- Buenas noticias para los jubilados: la paga extra de verano viene con sorpresa
- Multado con 112.000 euros un bar musical de Vilanova i la Geltrú por permitir el consumo de drogas
- Clamor en Madrid para que se homologuen ya 100.000 títulos universitarios: "Soy médico, pero trabajo en un 'burger'