Guardiola: «No dejamos que el Arsenal diera ni tres pases seguidos»

A Pep Guardiola hubo momentos en que pareció que se le quebraba la espalda. Vivió el partido como si le fuera la vida. La vida deportiva, claro. Y, tal vez sí le fuera porque sabía el técnico del Barça que era la noche clave. Por eso lo jugó como si fuera un futbolista más de su equipo. Hasta tres veces entró en el campo y resulta casi imposible enumerar la cantidad de veces que arengó a sus jugadores, después de enfrentarse con Arsène Wenger.

Cuando Europa está en juego, se pierden hasta los modales. «¡Tú, no nos ha respetado!», le gritó indignado el técnico del Arsenal a Busacca, el árbitro suizo que condicionó, en su opinión, todo el partido. «No me lo puedo creer, de verdad». El colegiado ni le hizo caso. Pero las quejas de Wenger, másmourinhistaque nunca, continuaron en la sala de prensa. «¡Cómo se puede expulsar a Van Persie por algo así! El árbitro mató el partido, mató un prometedor espectáculo. He hablado con la gente de la UEFA y no entienden lo que pasó», dijo el técnico del Arsenal, quien tampoco entendía que ningún jugador del Barça recibiera una tarjeta amarilla.

Lo que tampoco entendió Wenger es que el equipo de Guardiola le pasó por encima. Ya sucedió en Londres, pero cinco minutos de desconexión azulgrana le dieron esperanza, y se repitió anoche con un partido en el que Arsenal se marchó del Camp Nou sin disparar a puerta. 20-0. Ese fue el otro resultado del partido. 20 disparos del Barça, 0 del Arsenal. Y no tenía mayor orgullo Guardiola que recrearse en el soberbio encuentro de su equipo, sobreponiéndose incluso a accidentes tan singulares como el extraño autogol de Sergio Busquets.

EL CAMP NOU SILBÓ A CESC / Guardiola no quiso entrar en demasiada polémica con Wenger. «Puedo entender sus quejas, pero el día en que nos sentemos, con una copa de vino por medio, hablaremos de fútbol. Si ellos quieren sacar la excusa del árbitro, allá ellos. Pero yo miro el fútbol y ellos no han dado tres pases seguidos. ¡Ni tres pases seguidos! No han chutado ni una vez a puerta», dijo el técnico azulgrana en un mensaje que sonó a grito. «Hemos conseguido que un equipo tan grande como el Arsenal no nos haya tirado ni una sola vez. Quiero dar las gracias a la gente porque no nos ha fallado. Tampoco a ellos», recordó Guardiola, quien explicó luego lo que le dijo Wenger cuando acabó el partido. «Ves y felicita al árbitro», le soltó el técnico del Arsenal. «No, no lo he podido hacer, no he tenido tiempo», respondió Guardiola, quien no se enteró ni de que el Camp Nou había silbado a Cesc al ser sustituido.

ELOGIOS A MASCHERANO / Guardiola dijo no darse cuenta de que el capitán del Arsenal, que ya arrastraba una lesión, había sido cambiado. El técnico del Barça solo tenía la mirada en sus jugadores. «Solo hay que ver la carrera de Mascherano de 20 metros hacia atrás, eso es un equipo. SiMascheno es más rápido que Bendtner estamos ahora fuera de Europa», recalcó Guardiola retratando en esa desesperada, y a la vez providencial, acción delJefecito el compromiso de todo un equipo.