El Madrid se ensaña con el Barça en el Palau

Lejos de estar afectado por el golpe moral que supuso la derrota in extremis en el estreno de la final, el Madrid se levantó con la fiereza del campeón herido y devolvió el golpe con rabia en el Palau. El segundo partido de la final de la Liga Endesa fue un monólogo blanco de principio a fin (70-90).

El Barça no existió, desconectado por la defensa madridista y también por su propia incapacidad para generar una respuesta y viajará a Madrid, donde se disputan los dos próximos partidos (lunes y miércoles) en una situación complicada: con el 1-1 y la posibilidad real de que el equipo blanco sentencie en casa.

El equipo de Xavi Pascual fue una sombra del que 48 horas antes peleó y dio la cara, hasta hacerse con el triunfo valioso para abrir el 'play-off' final. Ese cambio de perfil, que se ha repetido muchas veces esta temporada, le costó un duro revolcón. 

En cuanto el Madrid comprobó que a su rival le flaqueaban las piernas, apretó para que la herida no parara de sangrar. Llull, con 20 puntos y 4 asistencias, y Ayón (19 puntos y 6 rebotes) , con una actuación enorme, lideraron la carga madridista.

En el Barça quizá tan solo Tomic (14 puntos y 5 rebotes) logró salvar la cara, y eso dejó una sensación amarga en parte de la afición azulgrana que abandonó la grada antes de que se consumara el drama.    

UN CUARTO DECISIVO

Solo necesitó 10 minutos el Madrid para cambiar la dinámica de la final, que parecía favorable a los azulgranas. Desde la amenaza  de verse en una situación limite, los jugadores de Laso se emplearon desde el inicio con más determinación.

Con dos cambios en el equipo titular, Llull por Sergio Rodríguez y Carroll por Maciulis, inyectó Laso la mentalidad adecuada. El base menorquín, en concreto, estuvo letal e hizo saltar y por las aires la defensa azulgrana con su juego directo y sus triples que dispararon las ventajas hasta un rotundo parcial de 12-28 en el primer cuarto, que condicionó el resto del encuentro.

 El Madrid también incidió en otro punto. Peleó por el rebote como no lo hizo en el debut y lo dominó con autoridad  ante un juego interior barcelonista muy limitado por las tres rápidas faltas de Tomic. 

MAL DÍA EN ATAQUE

No solo fue una cuestión de actitud lo que condenó al Barça. También estuvo lejos de la inspiración ofensiva del primer día. Sus porcentajes cayeron en picado y sus 4 triples en 18 intentos es el peor registro de la temporada.  

Con problemas para controlar el rebote, con Satoransky desconectado, y con su espesura en ataque el Barça deambuló en los primeros 20 minutos. Lo intentó Pascual dándole un vuelco al quinteto titular. Pero los cambios, con la presencia por primera vez de Arroyo y Lawal en la final, y la entrada de hombres de refresco como Vezenkov, no sirvió de nada frente aun Madrid autoritario, que abrió una frontera peligrosa de 21 puntos (16-37, m. 14), reducida por los azulgranas en el descanso (32-44) con mucho esfuerzo. 

Levantarse desde ese margen, minó la resistencia del Barça. Lo intentó el equipo, especialmente en el tercer cuarto, en el que llegó a rebajar las diferencias a cinco puntos (52-57) después de un triple de Perperoglou. Pero en el último periodo, volvió a adolecer de la tensión necesaria y un parcial de salida para los madridistas de 0-10 (del 58-66 al 58-76) acabó de escribir la condena barcelonista.

{"zeta-legacy-despiece-horizontal":{"title":"FC Barcelona, 70 - Real Madrid, 90","text":"Real Madrid:\u00a0Llull (20), Carroll (2) , Taylor (3), Thompkins (12), Ay\u00f3n (19) -cinco inicial-, Doncic (2), Rudy (7), Nocioni (3), Maciulis (-), Reyes (12), Rodr\u00edguez (12), Hernang\u00f3mez (-).\u00a0 10 de 29 triples (Llull, 3) 33 rebotes, 10 ofen. (Ay\u00f3n, 6). 17 asistencias (Rodr\u00edguez, \u00a05).Parciales: 12-28; 20-16; 26-22; 12-24."}}