Edificio telefónica en la Avinguda Roma

VÍDEO: JOAN CORTADELLAS

A una manzana de distancia ya se escucha el ruido atronador de las máquinas demoledoras y taladradoras. El polvo en suspensión se ha adueñado de las calles colindantes. Las obras del edificio Estel, antigua sede de Telefónica en la avenida de Roma, "martirizan" a los cientos de vecinos que conviven de 8 a 20 horas con los reiterativos estruendos, asegura el portero de una de las fincas próximas, Andreu Estrada. Desde fuera solo se ve el esqueleto del edificio, aunque es evidente que la actividad en su interior es frenética. “Durante la primera semana de septiembre no sé qué hacían que incluso llovía cemento”, asegura Estrada.