Oriol Junqueras cree que sería un "fraude" que no hubiera un pacto CDC-CUP

El proceso independentista toca a su fin, a tenor de las reacciones que suscita la negociación entre Junts pel Sí y la CUP. En ese contexto, el de las horas graves para una movilización ciudadana y política que nació en el 2012, cabe interpretar lo dicho este miércoles por Oriol Junqueras. El líder de ERC, fiel a su papel de intermediario entre CDC y los anticapitalistas, ha apelado a ambas fuerzas independentistas para que aparquen sus diferencias más irresolubles y lleguen a un acuerdo porque, de lo contrario, se llega al final del camino. "Si no hubiera acuerdo, ello supondría un fraude a dos millones de personas", las que el 27-S votaron candidaturas explícitamente independentistas.

Los republicanos han asistido con preocupación a la escalada verbal con la que la trinchera convergente reaccionó al doble 'no' anticapitalista en la sesión de investidura. En la mañana del miércoles, Junqueras convocó una ejecutiva extraordinaria de su partido para abordar el problema. A la conclusión, Junqueras ha señalado que la sesión de investidura dejó claro que las propuestas lanzadas iban "en el buen camino, y que ahora lo que toca es recorrer el trecho que falta". Recordó que los anticapitalistas abogan por un acuerdo de mayor calado que dote al nuevo Govern de la estabilidad parlamentaria suficiente para poder sacar adelante leyes tan importantes como la de la "transitoriedad jurídica".

Al mismo tiempo, la estructura del Govern propuesta por Mas fue "acogida positivamente" por la CUP, que dijo que la dirección del camino emprendido era la correcta. Así las cosas, Junqueras ha llamado a las partes a sacar adelante el acuerdo. Eso sí, Junqueras no se ha movido ni un milímetro respecto de quién debe ocupar la presidencia: "Nuestro candidato es y será Artur Mas".

DESEOS DE LA MINORÍA

A preguntas de los medios, el líder de Esquerra ha afirmado que él sí creía que había una mayoría para "culminar" el proceso independentista, en referencia a la mayoría parlamentaria actual. Es decir, justo lo contrario de lo dicho el martes por el candidato de CDC al Congreso, Francesc Homs. "Es de lógica. De lo contrario sería dar cumplimiento a los deseos de la minoría", ha sentenciado el republicano. 

El propio Homs, martillo de la CUP en los últimos días, ha levantado el pie del acelerador. Este miércoles ha asegurado que cree firmemente que al final habrá un acuerdo entre Junts pel Sí y la CUP, y ha añadido que "lo razonable" es que ese acuerdo se produzca antes de que se inicie la campaña electoral de las generales, el 4 de diciembre. En una entrevista a RNE, Homs aseveró que "las negociaciones siempre tienen sus más y sus menos", en referencia a lo dicho días atrás, sobre todo desde su propia trinchera o por él mismo. Incluso Mas ha querido poner su granito de arena en la distensión y ha afirmado que, si bien "no había soluciones mágicas, sí hay soluciones" a la situación política catalana. "Para que funcione, todos deben ganar algo y nadie perderlo todo", ha sentenciado el 'president'.