Puig esgrime la seguridad vial para vetar la prostitución en la carretera

Para salvar las fronteras competenciales, lanormaque regulará laprostituciónenCatalunyaviaja por una carretera secundaria. LaConselleria d'Interior, que no puede declarar legal ni ilegal el ejercicio de la prostitución ya que eso es competencia estatal, tiene previsto ampararse en laseguridad vialpara acabar con la presencia de mujeres que ofrecenservicios sexualesen losarcenesde las carreteras catalanas.

Fuentes de Interior detallaron que elconseller Felip Puigha dado órdenes a los responsables delServei Català de Trànsit para que elaboren undecreto--que posteriormente promulgaría el Govern-- queimpida el ejercicio de laprostituciónen la red de carreteras amparándose en la seguridad vial. "Para empezar, por el peligro que corren esas mujeres de seratropelladas; así como por ladistracciónque pueden suponer para los conductores", señalaron esas fuentes.

Interior también quiere armonizar lasordenanzas municipalescon que distintos ayuntamientos intentan poner coto a la prostitución. Una práctica que se ha revelado ineficaz porque lassanciones, muy rara vez pagadas, a lo sumo consiguen que las prostitutas setrasladenal pueblo más cercano sin norma restrictiva. ElAyuntamiento de Barcelonavalora positivamente la iniciativa de Puig. Pero laconcejala de Seguridad,Assumpta Escarp, señaló que no basta con homogeneizar ordenanzas y reclamó a Interior "unaley que regule el espacio públicoen Catalunya y que prohíba en la calle el ejercicio de actividades como la prostitución".

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