ATAQUE EN UN TREN DE RODALIES

Detenido el joven que arrancó el lóbulo de la oreja a un revisor

EL PERIÓDICO / BARCELONA

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Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado viernes al joven acusado de haber arrancado de un mordisco el lóbulo de una oreja a un interventor de Renfe, cuando este le sorprendió el pasado 22 de agosto viajando sin billete en la estación Mollet-Santa Rosa de la línea R-3 de Rodalies.

El detenido es un joven de 18 años, de nacionalidad española y vecino de Parets del Vallès, que ha sido acusado de un delito de lesiones y otro de atentado contra agentes de la autoridad. El presunto agresor, que fue localizado por los investigadores, pasó ayer a disposición judicial en el Juzgado de Instrucción de Mollet del Vallès.

La agresión se produjo alrededor de las  diez de la mañana, cuando el interventor le pidió al joven el título de transporte y este, según el relato policial, se abalanzó sobre él y le mordió en la oreja hasta arrancarle el lóbulo. El revisor tuvo que ser intervenido quirúrgicamente para reconstruirle la oreja tras la amputación. El agresor consiguió huir antes de que llegaran los Mossos d'Esquadra, que habían sido avisados por los responsables de la empresa ferroviaria.

CONDICIONES PRECARIAS

Los sindicatos CCOO, CGT, SF y UGT en Renfe condenaron desde el primer momento la «salvaje agresión» al trabajador y aprovecharon para denunciar las «condiciones de precariedad» con las que los revisores tienen que afrontar las agresiones «continuas» y los insultos de grupos concretos de jóvenes pasajeros, que intimidan también a otros usuarios.

CCOO alertó de que las agresiones a revisores son «reiteradas e insostenibles, excesivas en relación a otros medios de transporte de la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM)», y achacó la «falta de seguridad de los viajeros y de la ausencia de unas condiciones dignas de calidad del servicio» a la Conselleria de Territori i Sostenibilitat, titular del servicio, a los Mossos d'Esquadra y a la dirección de Rodalies de Renfe en Catalunya, que, denuncia, han reducido personal e inversiones, que permitirían, por ejemplo, instalar cerramientos en las estaciones para luchar contra los pasajeros sin billete.

Según el sindicato, cada mes se producen al menos una decena de actos violentos o hurtos, además de otras molestias o daños para los pasajeros, en especial en las líneas que recorren la ruta de las discotecas del Maresme y el Vallès el fin de semana.

Renfe y los Mossos d'Esquadra acordaron el pasado martes renovar los protocolos de seguridad para dar una respuesta más ágil a las agresiones a los interventores ferroviarios. Los mandos de la policía catalana y la empresa ferroviaria estudiaron nuevas medidas para mejorar la seguridad de los revisores y los pasajeros, como elaborar un mapa de los puntos negros donde se concentran la mayoría de incidentes violentos.

Los Mossos y Renfe han detectado que el mayor número de agresiones e insultos suelen producirse los fines de semana, en los trenes que circulan a primera y última hora del día, y en las líneas R-3 y R-4, a su paso por localidades como Montcada, Mollet, Granollers, Sabadell, Torelló y Manlleu, entre otras.

MEDIDAS DE AUTOPROTECCIÓN

Empresa y policía catalana pactaron impulsar la coordinación de los equipos de seguridad de Renfe con las policías locales y reforzar la formación que los Mossos ofrecen a los supervisores para instruirles en medidas de autoprotección. Son cursos que han seguido 139 interventores en los que se ofrecen consejos sobre cómo mantener la calma y la seguridad ante las provocaciones.

Ya el pasado enero, los agentes privados de seguridad en Renfe reclamaron más presencia policial tras la agresión a un vigilante en la estación de Sants, que fue lanzado a las vías. Un día antes, un vigilante en Madrid murió tras ser lanzado a las vías por un pasajero al que había recriminado su comportamiento incívico.