Arte para niños sirios

"Cuando empezó la guerra tenía mucho miedo porque los aviones lanzaban bombas a diario; nos mudamos a una casa que acabó destruida y me robaron los juguetes", explica Amar, de 6 años. "Mi padre no pudo venir con nosotros porque le obligaron a luchar. Aún está en Siria", añade Noor, de 10 años. Estos son algunos de los impactantes testimonios que recoge el cuento Amic meu. Una crónica del éxodo siriano contada e ilustrada por sus propios protagonistas: los niños. A través de su inocente mirada, el lector puede acercarse al terror de la guerra, la frustración de los campos de refugiados y la esperanza de un futuro mejor.

Amic meu es uno de los proyectos diseñados por los voluntarios de la asociación Open Cultural Center (OCC) junto con los niños del campo de refugiados de Cherso (Grecia). La entidad se fundó el pasado abril. "Fue cuando los voluntarios independientes que nos habíamos conocido en Idomeni tuvimos que constituirnos en asociación para poder acceder a los campos militarizados", explica la portavoz, Virgínia Sánchez.

Desde entonces, con sede en el barrio de Poblenou y gracias al trabajo de más de 250 voluntarios, OCC ha llevado a cabo distintos programas educativos y culturales con refugiados que viven en campos en Grecia y otros proyectos de concienciación en Barcelona.

"De momento, hemos construido tres centros culturales en los campos de refugiados de Idomeni, Cherso y Sounio, y ahora empezamos con el cuarto, en una zona urbana de Grecia", cuenta el director de OCC, Dídac Guillamet. "Pero desde un principio quisimos empoderar a los refugiados para que el proyecto fuese suyo -añade- , es decir, que fuesen ellos los profesores y administradores de las actividades educativas y culturales de los centros".

A parte de las distintas actuaciones en Grecia, Open Cultural Center impulsa una serie de proyectos en Barcelona para informar, concienciar y sensibilizar a la población catalana sobre la crisis migratoria y la importancia de promover la acogida. "Desde OCC tratamos de integrar a refugiados que han llegado aquí, proporcionándoles una ocupación como dar clases de árabe", explica Guillamet. "También hemos preparado una exposición fotográfica hasta el 15 de febrero en el Espai Jove La Fontana y estamos organizando charlas sobre los refugiados en escuelas, asociaciones y bibliotecas", agrega.

Un cuento muy real

En este sentido, la entidad pretende difundir el cuento Amic meu como una herramienta educativa en la escuela. "Junto a una guía didáctica, lo queremos llevar a las aulas para trabajar la inclusión, el respeto y la tolerancia", comenta la coordinadora del proyecto Amic meu, Maria Clapar. "Es importante que los niños entiendan qué pasa no muy lejos de aquí y que nos podría ocurrir a nosotros", añade.

El precio del libro es de 10 euros que servirán para continuar financiando las actividades de OCC en Grecia. El cuento se titula Amic meu porque los refugiados de los campos se dirigem a los voluntarios llamándoles my friend. "A pesar de su situación, te abren las puertas -concluye Virgínia Sánchez- Hagamos nosotros lo mismo".